Cuentos

Sonó el teléfono ¿Bueno?

2010-08-05

María no entendió quizás, porque el Rey tenía que nacer tan pobre y...

Aquí empieza una platica muy larga de esas que algo te dejan para reflexionar y por que no para mejorar.

- ¿Cómo estas?

- Pues ya mejor, gracias a Dios, pues... ¿qué te paso?

- Tuve un accidente, ¡cómo! Sí pero...

- ¿cómo estas? ¿Qué paso?

Ahí empezó la platica explicando con puntos y comas la inesperada pero no por eso una muy bendita experiencia (interrumpe)

- pero... ¿ alguien te ayudo?

Y sigue la platica no sin antes poner con letras MAYÚSCULAS los nombres de las personas que estuvieron ahí, tanto conocidas las que yo les llame, como desconocidas, dando todas muestras de solidaridad hacia una desconocida en este caso era yo.

Seguimos hablando del hospital, él medico, radiografías, etc. ¡qué suerte tuviste amiga! Claro que sí, a ya casi un mes, sigo escuchando: Dime que se te ofrece; en que te puedo ayudar; cuenta conmigo y todo lo que hace la gente generosa: "Lo que hagas por uno de estos, lo haces por Mí".

Por ahí supe que en una reunión comentaron que en el momento del choque no hallaba yo a quien hablarle y dijo alguien que desde aquí le agradezco ¡Por que no me hablo a mí!

Con mucho gusto hubiera yo ido a ayudarle, eso me llena de felicidad, el saber que cuento con personas Tan generosas ¡Ay! Amiga que suerte tienes, ya voy a colgar por que creo que ya te canse con mi historia; después te platico de un ángel que en el momento del accidente estuvo ahí, no se separo un instante preguntándome como me sentía, a quien le hablaba, dándome siempre ánimo; se despidió ya que vio que me llevaban al hospital..... amiga, si no crees en los Ángeles, es problema tuyo yo lo tuve a mi lado por casi dos horas.

Adiós, Y gracias por escucharme... en ese momento... di una vez más gracias a Dios por los Ángeles que hay aún en la tierra.

MICRO-REFLEXIÓN:

"María no entendió quizás, porque el Rey tenía que nacer tan pobre y humilde, al igual que otras tantas cosas, sin embargo ella guardaba todo en su corazón, pero además ella creyó. La Fe es eso, precisamente, lo que a nosotros más nos cuesta, CONFIAR EN DIOS".



EEM

Notas Relacionadas

No hay notas relacionadas ...



Ver publicaciones anteriores de esta Columna

Utilidades Para Usted de El Periódico de México