Internacional - Población

Masiva marcha de chinos en Roma contra asesinato de bebé en asalto

2012-01-10

ROMA, (AFP) - Miles de chinos y comerciantes italianos marcharon pacíficamente este martes por las calles de Roma para protestar contra la inseguridad en la capital italiana tras el asesinato la semana pasada de un bebé y su padre durante un asalto a una tienda de una familia china.

Llevando flores blancas y velas, cerca de 10,000 personas, según los organizadores, desfilaron por la céntrica plaza Vittorio, corazón y emblema del barrio chino, no muy lejos del barrio de Torpignattara, donde ocurrió el asalto en el que murió Zhou Zeng, de 31 años y su hija Joy, de tan sólo seis meses.

"Estamos muy preocupados, nosotros realizamos muchas transacciones en dinero contante, por lo que somos blanco frecuente de delincuentes", explicó a la AFP Marco Wong, responsable de la asociación china Associna.

Para Lucia King, representante de la comunidad china de la plaza Vittorio, donde dominan las tiendas de ropa, supermercados y restaurantes, "la gente está cansada de los robos, atracos y agresiones".

Desde hace meses los delitos contra comerciantes chinos han aumentado en la zona y en la mayoría de los casos son perpetrados por jóvenes delincuentes del Norte de Africa, contra los cuales los chinos no presentan denuncia ya que el dinero que manejan no suele ser declarado oficialmente.

"No a la violencia, más seguridad", rezaba una de las pancartas, mientras varios manifestantes cargaban las fotos gigantes de las dos víctimas y algunos lloraban.

El miércoles pasado Zeng estaba caminando junto a su esposa hacia su casa después de haber cerrado su bar y agencia de transferencia de dinero. Cargaba en los brazos a Joy, su bebé, cuando dos jóvenes en una moto intentaron robarle la cartera a su mujer, en la que llevaba miles de euros.

Ante la resistencia de la esposa, los asaltantes dispararon, matando con una sola bala a la bebé y al padre, quien se desplomó inmediatamente sobre la acera.

En su huida, los asaltantes dejaron muchos rastros, inclusive abandonaron el dinero (16,000 euros) manchado con la propia sangre, por lo que la policía, presionada por las autoridades y la opinión pública, en pocos días los identificó y estableció que se trataba de dos magrebíes de entre 20 a 30 años, detenidos en varias ocasiones por pequeños hurtos, casi siempre contra chinos.

La comunidad china de Roma, formada por unas 50,000 personas, cerró sus negocios durante algunas horas como gesto de protesta, mientras el embajador de China, Ding Wei, pidió que se castigue a los responsables.

El domingo por la noche, el presidente de la República, Giorgio Napolitano, visitó a la viuda para manifestarle la solidaridad de los italianos y el alcalde de la ciudad, Gianni Alemanno, proclamó una jornada de luto en memoria de la pequeña Joy.

La policía sigue buscando a los asesinos por lo que desplegó un imponente operativo en la capital aunque teme que se encuentren ya fuera de la península.



KC