Internacional - Población

UNICEF condena uso de niños por parte de Sendero Luminoso en Perú

2012-04-28

Foto del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas peruanas incautada a miembros de Sendero Luminoso...

Reynaldo Muñoz

El secuestro y utilización de niños por parte de Sendero Luminoso en acciones de violencia en Perú, una práctica usada durante años, recibió este miércoles la condena de la UNICEF y del delegado de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.
 
"El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia rechaza la participación directa o indirecta, forzada o voluntaria de niños, niñas y adolescentes en cualquier situación de violencia armada", subraya un pronunciamiento de ese organismo internacional.
 
En los últimos días informes militares denunciaron que Sendero Luminoso utiliza a menores en los ataques que perpetran contra efectivos militares en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE, sudeste), una zona selvática que le sirve de refugio desde hace dos décadas.
 
Además mostró imágenes capturadas en operaciones contra los senderistas en que se aprecia a niños portando fusiles AKM y ametralladoras de gran calibre.
 
"La utilización de niños y adolescentes por parte de Sendero Luminoso constituye una violación de la Convención de los Derechos del Niño (CDN) y los coloca frente a una situación de vulnerabilidad extrema que afecta su desarrollo emocional, social, cognitivo y físico", precisó UNICEF.
 
El organismo aseveró que la CDN "prohíbe expresamente el involucramiento y utilización de niños, niñas y adolescentes en acciones de esta naturaleza, tanto por parte de grupos armados como de fuerzas armadas".
 
UNICEF recuerda que también está prohibido "el reclutamiento forzoso y obligatorio de menores de 18 años y lo define como una de las peores formas de trabajo infantil".
 
El uso de niños y adolescentes no es nuevo en Perú y se remonta a inicios de la guerra interna que desató en 1980 Sendero Luminoso, derrotada y desmembrada a mediados de los 90, con la captura de su máximo líder Abimael Guzmán, que cumple cadena perpetua.
 
Lo que quedan del ex grupo guerrillero son columnas consideradas remanentes que actúan en zonas alejadas de la selva en alianza con narcotraficantes, según el gobierno.
 
"Sendero siempre ha tenido niños, de edades entre 11 y 13 años, a los que llamaba 'niños pioneros o pioneritos', que obtenía mediante enrolamientos forzosos en comunidades amazónicas y andinas en los años 80 a fin de convertirlos en combatientes", dijo a la AFP el sociólogo Jaime Antezana, un estudioso de la violencia política en Perú.
 
"Actualmente los líderes senderistas que actúan en el valle de los Ríos Apurímac y Ene lo que hacen es reproducir una vieja práctica senderista", añadió.
 
El experto aludía a los hermanos Víctor, Jorge y Martín Quispe Palomino, que encabezan las columnas senderistas en ese extenso valle selvático, una zona cocalera donde actúan en alianza con bandas de narcotraficantes, según el gobierno y analistas de la violencia política.
 
Uno de ellos, Martín, conocido como 'camarada Gabriel', dirigió el 9 de abril el secuestro de 36 trabajadores de una empresa gasífera en la región surandina de Cusco, que fueron liberados cinco días después.
 
"Los Quispe Palomino también comenzaron siendo chiquillos en los años 1978 y 1979 y ahora hacen lo mismo con sus hijos", refirió Antezana.
 
El representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) en Perú, Flavio Mirilla, condenó el secuestro de niños por parte del terrorismo y pidió "sanciones muy severas" para los responsables.
 
"Esta acción es totalmente condenable y está en contra de la Convención de los Derechos del Niño, es deplorable utilizarlos para fines bélicos y para el narcotráfico", dijo Mirilla a la agencia oficial Andina.
 
El conflicto armado que inició Sendero Luminoso dejó un balance de 69.000 muertos y desaparecidos entre 1980 y 2000.
 
El secuestro y utilización de niños por parte de Sendero Luminoso en acciones de violencia en Perú, una práctica usada durante años, recibió este miércoles 25 de abril de 2012 la condena de la UNICEF y del delegado de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.



KC