BARONES Y MAGNATES
Gracias, Elon, estropeaste Twitter
Hace unos seis meses, Elon Musk compró tu bar favorito del vecindario. Luego despidió a los porteros y cantineros experimentados, intentó timar al propietario del local y al menos a un proveedor, y exigió que los asistentes regulares comenzaran a pagar una entrada.