El gobierno del presidente estadounidense Donald Trump está listo para iniciar conversaciones incondicionales con Irán en un esfuerzo por aliviar las crecientes tensiones que han desencadenado temores de un conflicto, dijo el domingo el secretario de Estado Mike Pompeo.
El organismo de supervisión nuclear de la ONU dijo el viernes que Irán aún permanece dentro de los límites impuestos por el pacto nuclear que celebró con las grandes potencias en 2015, aunque sigue acumulando reservas de uranio de bajo enriquecimiento y agua pesada.
No todos los enemigos son igual de enemigos. Arabia Saudí ha reunido este jueves, tras el fin del preceptivo ayuno de Ramadán, a mandatarios árabes y musulmanes en busca de un frente común contra Irán tras una cadena de asaltos a petroleros y estaciones de bombeo de cuya autoría acusa a Teherán.
No “hay motivos” para que Irán se retire de su acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales más allá de tratar de fabricar armas atómicas, dijo el miércoles el principal asesor de seguridad del presidente de Estados Unidos.
Hace tres años, cuando Irán capturó a 10 marinos estadounidenses que entraron por error en aguas iraníes, el secretario de Estado, John Kerry, y el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Mohammad Javad Zarif, descolgaron al teléfono en cuestión de minutos y resolvieron la liberación en horas.
Irán no entrará “bajo ninguna circunstancia” en una guerra con Estados Unidos, ya sea directa o a través de fuerzas aliadas, afirmó el miércoles un destacado legislador reformista en Irán, mientras Washington y Teherán trataban de suavizar las tensiones en la región.
El presidente iraní, Hassan Rouhani, rechazó cualquier posible conversación con Estados Unidos y pidió el martes que se otorgue al gobierno más poder para dirigir una economía local golpeada por la “guerra económica”.
La comunidad internacional y los restantes signatarios del pacto nuclear de Irán deben actuar para salvar el acuerdo, ya que las “declaraciones de apoyo” no son suficientes, dijo el ministro de Relaciones de Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif.
El ministro de Exteriores de Irán viajó el viernes a China dentro de una gira por Asia que busca mantener los mercados mundiales abiertos a Teherán en medio de una intensa campaña de sanciones por parte de Estados Unidos en un momento de altas tensiones en el Golfo Pérsico.
La tensión entre Irán y Estados Unidos aumenta con el paso de los días. Al envío de un nuevo buque de guerra por parte de Washington el pasado viernes se sumaron esta semana los dimes y diretes sobre un posible despliegue militar suficientes para encender las alarmas.
El líder supremo de Irán lanzó una amenaza velada en un discurso en el que afirmó que “nadie está buscando la guerra”, y dijo que no sería difícil que la República islámica enriquezca uranio a un nivel suficiente para su uso en armas ante un aumento de las tensiones con Estados Unidos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha pedido este jueves al Gobierno de Irán que inicie un proceso de conversaciones en torno a su programa nuclear, al tiempo que ha rechazado descartar un enfrentamiento militar ante el incremento de las tensiones.
Irán ha anunciado este miércoles que suspende algunas de sus obligaciones con el acuerdo nuclear firmado en 2015 en respuesta al abandono del pacto por parte de Estados Unidos hace justo un año. Con la decisión, que implica ignorar los límites a sus reservas de uranio enriquecido y agua pesada,
Irán se dispone a “reducir su compromiso” con el acuerdo nuclear de 2015 ante la creciente presión de Estados Unidos.
En un discurso ante una conferencia sobre Medio Oriente en Varsovia, el vicepresidente estadounidense Mike Pence acusó el jueves a Irán de ser el mayor patrocinador mundial de terrorismo y exhortó a los aliados europeos a que sigan el ejemplo de su país y se retiren del histórico pacto nuclear.
Rusia estaría dispuesta a considerar nuevas propuestas de Estados Unidos para reemplazar un suspendido pacto nuclear creado en la Guerra Fría por un tratado más amplio que incluya a más países, dijo el jueves el viceministro de Relaciones Exteriores, Sergei Ryabkov.
Irán desestimó el martes las críticas de la Unión Europea por su programa de misiles, políticas regionales e historial en materia de derechos humanos, lo que destaca una relación cada vez más tensa mientras ambas partes tratan de salvar un acuerdo nuclear.
Rusia dijo el sábado que el colapso de un pacto nuclear de la época de la Guerra Fría podría llevar a una carrera armamentista y un enfrentamiento directo entre varias regiones, luego de que una propuesta de Moscú fuera rechazada en una votación de Naciones Unidas.
Borrell ha recordado que el "problema viene de lejos" dado que ya "durante la Administración Obama" el Gobierno estadounidense venía denunciando su "inquietud" por el desarrollo de un sistema de misiles "que violaba las previsiones del tratado", aunque ha admitido que el anuncio del presidente.
"Estamos en contra de la ruptura del tratado, pero si eso ocurre ya responderemos de la manera correspondiente", ha afirmado Putin, que ha acusado a Washington de no presentar "ninguna prueba" de las supuestas violaciones en las que habría incurrido Moscú, según la agencia Sputnik.
