Las inundaciones que han devastado el estado brasileño de Rio Grande do Sul todavía no disminuyen y otro flagelo se ha esparcido por la región: la desinformación en redes sociales, la cual está dificultando los desesperados esfuerzos por llevar ayuda a miles de personas que la necesitan.
En las inundaciones del sur del Brasil, que dejan al menos 150 muertos y más de dos millones de damnificados, coincidieron varios fenómenos climáticos que transformaron la región en una olla a presión potenciada por el calentamiento global.
Los rescatistas buscaban el martes en ríos y entre los escombros de los poblados devastados cadáveres y, en la medida de lo posible, sobrevivientes de las inundaciones repentinas que azotaron la isla indonesia de Sumatra durante el fin de semana.
El número de muertos por las lluvias torrenciales e inundaciones que se suceden en Kenia desde mediados del pasado marzo ha ascendido a 289, y 75 personas continúan desaparecidas, informó este martes el Ministerio de Interior del país.
La cifra de muertos por las devastadoras inundaciones en Afganistán aumentó este martes a más de 350 mientras los equipos de emergencia de los talibanes continúan con las operaciones de búsqueda y asistencia a los más de un millar de heridos por esta catástrofe.
El Gobierno brasileño anunció este lunes una suspensión de los pagos de la deuda del estado de Rio Grande do Sul con el Tesoro durante tres años, para ayudar a la reconstrucción de esa región devastada por las inundaciones.
Los rescatistas recuperaron más cadáveres el lunes después que las lluvias del monzón provocaran inundaciones repentinas en la isla indonesia de Sumatra. Los torrentes de lodo volcánico mataron a 43 personas y había otras 15 desaparecidas.
Cuando Abdul Ghani, un agricultor, se enteró de que devastadoras inundaciones habían azotado su aldea en el norte de Afganistán la semana pasada, se apresuró a regresar desde la provincia vecina de Kunduz donde estaba visitando a familiares.
La tragedia que se vive en el sur de Brasil, donde las inundaciones por las fuertes lluvias que azotan la región desde hace dos semanas ya han dejado 144 muertos y 125 desaparecidos, puede empeorar en las próximas horas debido a la crecida de los ríos por los temporales de este domingo.
Entre los muertos hay por lo menos 51 niños, según UNICEF, una de varias agencias internacionales que están enviando equipos, medicinas, cobijas y otros suministros. La Organización Mundial de la Salud anunció que envió 7 toneladas de medicinas y botiquines de emergencia.
Las autoridades canadienses instaron a todos los residentes que quedaran en una localidad del nordeste de la provincia de Columbia Británica a marcharse de inmediato pese a la mejora de las condiciones meteorológicas, después de evacuar a miles de personas debido a un incendio forestal que crecía.
Se prevé que durante el fin de semana caigan más de 15 centímetros (casi 6 pulgadas) de lluvia, lo que empeorará la situación. Además, apuntó, existe una alta probabilidad de que se intensifiquen los vientos y aumente el nivel del agua en la laguna de los Patos, en la capital estatal, Porto Alegre.
Las inundaciones y los deslizamientos de tierra en África oriental provocados por las lluvias torrenciales caídas en las última semanas están afectando a casi un millón de personas en Burundi, Kenia, Somalia y Tanzania, informó el Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef).
El número de muertos por las devastadoras inundaciones que castigan al sur de Brasil llegó a 116 este viernes y el Gobierno alertó sobre unas fuertes precipitaciones previstas para el fin de semana, que pueden agravar aún más una situación que ya es crítica.
Las autoridades canadienses advirtieron este jueves que el país tiene 87 incendios forestales activos, de los que seis están fuera de control, y que la situación en el oeste del país de cara a la temporada de fuegos es preocupante por la intensa sequía que sufre la región.
Peligrosas tormentas sacudieron diversas partes del sur de Estados Unidos el jueves, aun cuando la región se había librado del clima extremo anterior que produjo tornados, provocó la muerte de al menos tres personas e hirió de gravedad a un niño que fue arrastrado a un desagüe pluvial
Las devastadoras inundaciones en la región sur de Brasil han dejado hasta el momento 108 fallecidos y 136 desaparecidos, además de 374 heridos, según el balance divulgado este jueves por la Defensa Civil.
Al menos cuatro personas murieron y más de 50 millones de residentes en estados desde Texas a Misuri y Carolina del Norte están este jueves bajo alerta por las tormentas y tornados.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció este jueves un paquete de ayudas de 50,000 millones de reales (9,800 millones de dólares) al estado de Rio Grande do Sul, afectado por unas inéditas inundaciones que ya han dejado 108 muertos y una enorme destrucción en la región.
Los meteorólogos advirtieron de una serie de peligrosas tormentas en Estados Unidos que podrían pasar por zonas del sur el jueves, después de que las tormentas del día anterior provocaran tornados dañinos y granizo de gran tamaño, que mataron a dos personas en Tennessee.
