"Debemos ser extremadamente cuidadosos en no pensar en perseguir el virus continuamente y pensar que podemos estar preparados con una composición de la vacuna que se ajuste exactamente a lo que estará en circulación en el futuro. Eso es sencillamente imposible".
Pfizer y Moderna ya estaban elaborando y probando refuerzos contra la primera ómicron mutante, anticipando ponerlos en circulación en octubre. Hallaron que la protección adicional es segura y se abocaron a producir más anticuerpos contra la ómicron en lugar de nuevas dosis de la vacuna actual.
La letra de hoy es “V”, por vacuna. Elmo fue vacunado contra el COVID-19 el martes, según Sesame Workshop, la organización educativa sin fines de lucro que realiza el programa “Plaza Sésamo”.
No estaba claro de inmediato cómo las autoridades distribuirán la nueva vacuna o qué función cumpliría en la próxima fase de la pandemia. Las inyecciones estaban diseñadas para la versión original del coronavirus, no para la variante ómicron más contagiosa que hizo estragos en el país meses atrás.
“Soy cantante. Estoy en estos bares llenos de gente, en pequeños clubes, algunos de los cuales no tienen buena ventilación. Mucha gente a mi alrededor”, comenta Mancini, quien también toca el acordeón y percusión. “Es el precio que tengo que pagar por este oficio con el que me gano la vida”.
La farmacéutica alemana BioNTech y la gigante estadounidense Pfizer dijeron el miércoles que en el segundo semestre de este año comenzarán las pruebas en humanos de vacunas de próxima generación que protegen contra una amplia variedad de coronavirus.
Algunos adultos estadounidenses podrían recibir vacunas actualizadas contra el COVID-19 a fin de año, ya que los asesores del gobierno votaron el martes a favor de recomendar que es momento de poner al día las dosis de refuerzo para que se adapten mejor a las variantes más recientes del virus.
Las vacunas actuales contra el COVID-19 salvaron millones de vidas en todo el mundo en tan solo su primer año de uso. Y las inyecciones de Moderna y Pfizer aún ofrecen una fuerte protección contra los peores resultados —enfermedad grave y muerte_, especialmente después de un refuerzo.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos dijeron el viernes que recomendaron la vacuna contra el COVID-19 de Moderna para niños y adolescentes de 6 a 17 años, lo que permitió que comenzara la implementación de las inyecciones para ese grupo de edad.
Las dosis empezaron a llegar a algunos locales durante el fin de semana, incluyendo uno en Lexington, Carolina del Sur, donde un niñito de 3 años llamado Fletcher Pack se despertó el lunes en la mañana y le preguntó a su madre: “¿Es hoy el día de la vacuna?”.
Las autoridades sanitarias de Estados Unidos anunciaron el sábado vacunas contra el COVID-19 para bebés, niños pequeños y en edad preescolar.
La portavoz de la Casa Blanca Karine Jean-Pierre, quien el jueves confirmó que Florida no había solicitado las vacunas, dijo que no preordenarlas podría traducirse en demoras en su disposición en hospitales pediátricos y otras instalaciones que han dependido de la distribución estatal de las mismas
“Se trata de una vacuna muy esperada”, dijo uno de los miembros del panel: el doctor Jay Portnoy, del Hospital Infantil de Kansas City, Missouri. “Hay muchos padres que están desesperados por recibir esta vacuna y creo que les debemos dar la opción de vacunarse si lo desean”, añadió.
Las dosis pediátricas de la vacuna de Pfizer contra el COVID-19 lucen seguras y efectivas para los menores de 5 años, informaron funcionarios federales de salud el domingo, un paso clave hacia la largamente esperada decisión de comenzar a vacunar a los niños estadounidenses más pequeños.
Las autoridades han recibido millones de pedidos para vacunas contra el COVID-19 destinadas a niños pequeños antes de la posible autorización federal la semana entrante, informaron funcionarios de la Casa Blanca.
Los resultados del estudio preliminar de Moderna muestran que las personas a las que se les administró la vacuna combinada experimentaron un mayor aumento de los anticuerpos que combaten la variante ómicron que los que sólo recibieron una cuarta dosis de la vacuna original.
Un nuevo dispositivo ofrece una lectura a simple vista del nivel de anticuerpos contra la covid-19 en personas vacunadas, que podría usarse para hacer cribados masivos o controlar el estado inmunitario de los individuos, según un estudio que publica hoy Science Advances.
En mayo, Pfizer Inc y su socio alemán BioNTech SE también acordaron retrasar tres meses las entregas de la vacuna contra el COVID-19. La Comisión Europea tiene previsto cerrar más acuerdos de este tipo en un futuro próximo, declaró.
Uno de los autores de la investigación, Eng Eong Ooi, deseó que estos hallazgo promuevan más estudios “para comprender plenamente los mecanismos subyacentes a los efectos secundarios asociados a las vacunas y contribuir colectivamente a desarrollar vacunas aún más tolerables".
Pfizer ofrecerá casi dos docenas de productos, incluida su vacuna y su tratamiento contra el COVID-19, dos éxitos de ventas, a precios sin fines de lucro en algunos de los países más pobres del mundo, según anunció la compañía el miércoles.
