Tres horas y 49 minutos de magnífico nivel tenístico entre una leyenda y un talento con un presente ya brillante y un futuro dorado por delante. Había más de quince años de diferencia entre Nole y Carlitos, pero en el campo reinó la igualdad en una batalla para la historia de este deporte.
El español Carlos Alcaraz mantiene el liderato de la clasificación ATP a pesar de caer derrotado en la final del Master 1000 de Cincinnati frente al serbio Novak Djokovic por 7-5, (7)6-7 y (4)6-7 y se asegura ser primer cabeza de serie en el Abierto de Estados Unidos.
Alcaraz, de 20 años, en plena defensa del número uno del mundo antes de acometer la defensa de su título del Abierto de Estados Unidos, jugará en cuartos contra el australiano Max Purcell, procedente de la fase previa, que se impuso con claridad al suizo Stanislas Wawrinka por 6-4 y 6-2.
"Tengo que seguir y encontrar motivaciones por lo que se viene y por los desafíos que tengo por delante, es por eso que estoy aquí. Si no estuviera motivado, no estaría aquí. Después de muchos años de tenis profesional, creo que tengo posibilidad de elegir jugar los torneos que realmente quiero".
Alcaraz y Djokovic fueron convocados el lunes por España y Serbia, respectivamente, para el torneo que se disputará entre el 12 y 17 de septiembre en Valencia. Alcaraz derrotó a Djokovic en la final de Wimbledon en julio. El español es el número del mundo, mientras que Djokovic es el segundo.
Sin embargo, no pudo en cuartos con un Paul que firmó una fantástica actuación, que le ha ganado en dos de sus tres enfrentamientos hasta ahora (Alcaraz le superó este año en el Masters 1,000 de Miami) y que jugará en semifinales contra el vencedor del partido entre Gael Monfils y Jannik Sinner.
La competición femenina en Montreal tampoco pudo escapar a la lluvia que afectó al torneo de Toronto, tanto que no se pudieron disputar los partidos de octavos entre la bielorrusa Aryna Sabalenka y la rusa Liudmila Samsonova y entre la checa Petra Kvitova y la suiza Belinda Bencic.
Pero al final, Alcaraz apretó el acelerador en el momento crítico del partido. En el tie-break del segundo y último set, el jugador murciano se adelantó con un 4-1 y Shelton fue incapaz de recuperarse cediendo el set y el partido con un 6-3 en el juego de desempate.
Alcaraz y Monfils disfrutaron tanto que tras agotar el tiempo que tenían asignado para el entrenamiento, siguieron con la pachanga en una pista vecina para deleite de los aficionados canadienses que seguían con atención las evoluciones de los dos jugadores.
De los 10 primeros jugadores de la ATP sólo el número 2 del mundo, Novak Djokovic, de 36 años, no estará presente en el torneo canadiense. El serbio anunció el pasado 23 de julio, tras su derrota en la final de Wimbledon ante Alcaraz, que había decidido no acudir a Toronto por fatiga.
Djokovic renunció a disputar el torneo canadiense -arrancará la gira directamente en Cincinnati- y, dado que el pasado año no jugó en América por su negativa a vacunarse contra el coronavirus, sólo puede incrementar su cuenta de puntos tanto en ese campeonato como en el US Open.
Este sábado, Croacia decidirá el futuro de Alcaraz y Masarova en la Copa Hopman. Vekic y Coric esperan con el puñal entre los dientes. Si España gana 3-0, continuará en la competición. Si gana 2-1, habrá que hacer números con los sets y los juegos ganados por cada selección.
Ahora, cuando apenas se ha consumido la primera quincena de julio, se convierte en el primer jugador clasificado para esta cita de gran prestigio y que otorgará hasta 1,500 puntos al campeón si éste es capaz de vencer sus cinco partidos, los tres de la fase de grupos más la semifinal y la final.
El mayo salto en el ranking masculino lo dio el estadounidense Chris Eubanks. En virtud de acceder a los cuartos de final en Wimbledon, Eubanks alcanzó el mejor ranking de su carrera como 31ero. No se registraron modificaciones entre los 13 primeros del ranking de la ATP.
Lo normal era preguntarle a Djokovic con quién puede comparar a la nueva sensación del tenis masculino — Carlos Alcaraz — tras perder ante el español al cabo de cinco sets y más de cuatro horas y medio de juego brillante y momentos dramáticos en la final de Wimbledon el domingo.
¿Novak Djokovic lamenta algo? Sí, dos cosas. El desempate casi al inicio de la final de Wimbledon el domingo, cuando el serbio de 36 años estaba a un punto de colocarse arriba por dos sets ante Carlos Alcaraz de 20 años.
No mintió Carlos Alcaraz. Iba a ser el mejor día de su vida. Y lo fue. El español bordó el primer título en Wimbledon de su carrera deportiva, ante Novak Djokovic, el siete veces cample, y cumple el sueño de su niñez: ganar el Grand Slam más bonito de todos y ante uno de los mejores de la historia.
El cierre del partido fue lleno de mística, como en las mejores finales, con el intento de respuesta de Djokovic, que llevó al límite al español, que mostró un dominio de todos los estilos. Con el triunfo, Alcaraz se coloca en el número uno del ranking de la ATP.
El italiano dejó escapar puntos de quiebre, incluidos dos puntos de set en el tercer parcial, mientras que Djokovic se mostró tan eficaz como de costumbre, ejerciendo una presión constante sobre el saque del octavo cabeza de serie y aprovechando las oportunidades que se le presentaban.
Con este triunfo, Djokovic llega a las nueve finales en Wimbledon, a tres de Federer, lleva 35 en Grand Slam, el que más en la historia entre hombres y mujeres, y peleará por igualar los 24 Grandes de Margaret Court este domingo. Su rival, Carlos Alcaraz o Daniil Medvedev.
