VALORES MORALES
Perdonar para ser perdonado
Ahora bien, quizá este mandamiento lo valoraríamos de otro modo si cambiáramos la perspectiva. ¿Qué nos parecería si en realidad el Señor no nos estuviera hablando a nosotros sino a esa persona a la que hemos hecho daño y que tiene la posibilidad de vengarse de nosotros.