COMO ANILLO AL DEDO
El milagro de Pedro Sánchez
Estaba muerto. Respiraba -de tanto en tanto respiraba-, pero su vida política se había acabado radical, catastróficamente. Acababa de ser destituido como secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), había devuelto su acta de diputado para no votar a Mariano Rajoy como presidente