MUY OPORTUNO
Modernismo, compendio de todas las herejías
Así pues, los dogmas no serían más que la transposición de las propias emociones en una noción intelectual que es su imagen expresiva, su envoltura, y, por tanto, no hay duda de que siempre sería un elemento variable y sujeto a cambio de dos errores: agnosticismo e inmanentismo.