El gobierno de Japón alertó a la región de Tokio de posibles cortes de luz el martes debido al bajo suministro de energía después de que varias plantas de carbón dejaran de producir electricidad de forma temporal tras el sismo de la semana pasada.
Residentes en Fukushima y Miyagi limpiaban sus casas el jueves tras una noche en vela luego de un potente sismo de magnitud 7,4 que remeció la costa norte de Japón y rompió muebles, cortó la electricidad y causó cuatro muertes.
Un sismo de magnitud 7,3 estremeció el miércoles la zona costera de Fukushima en el norte de Japón, provocando advertencias de tsunami y sumiendo en la oscuridad más de 2 millones de viviendas en el área de Tokio.
Las labores de búsqueda continuaban el domingo en las zonas más afectadas en la isla de Sumatra en Indonesia, después de que un sismo cobró la vida de 11 personas, lesionó a casi 400 y dejó a miles de desplazados, informó un funcionario de desastres.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por su sigla en inglés) informó que el temblor se produjo a las 0712 GMT, tuvo su epicentro en Nueva Concepción, un municipio del departamento de Escuintla -en la región sur central de Guatemala- y registró una profundidad de 83,6 kilómetros.
Por ahora, Pierluisi encontró una solución temporal: el lunes les ofreció a los profesores aumentos de hasta 1000 dólares al mes, a partir del 1 de julio, con cargo a fondos federales que se extienden hasta 2024. Dijo que le gustaría encontrar la manera de que los aumentos fueran permanentes.
Irmary Claudio, maestra de Español de la Escuela Bilingüe Padre Rufo de Santurce (San Juan), fue una de tantos enseñantes que acudieron a la manifestación en apoyo, según dijo a Efe, de mejores condiciones salariales y "por un retiro que no arroje al magisterio a la miseria".
El viernes, 32 personas habían sido rescatadas de un barco volcado a ocho kilómetros al oeste de las islas Bimini, en otra supuesta operación de "tráfico humano", según indicaron la Guardia Costera estadounidense y las Fuerzas Armadas bahameñas.
Personas desconocidas derribaron una estatua del explorador español Juan Ponce de León el lunes antes de la visita del rey Felipe VI a Puerto Rico.
La ONU aumentó el martes a 26 el saldo de muertes debido a un par de sismos ocurridos el día anterior en el oeste Afganistán, afirmando que tres aldeas de unas 800 viviendas quedaron totalmente devastadas.
La primera ministra peruana, Mirtha Vásquez, ha pedido un informe a la Marina sobre los criterios técnicos para la emisión de alerta de tsunami, después que dicho organismo avisara el sábado de forma tardía de un “oleaje anómalo” tras la erupción de un volcán en Tonga.
Un volcán submarino entró en erupción de forma espectacular cerca de Tonga, una nación del Pacífico sur, provocando que olas de tsunami se estrellaran en la costa y que la gente corriera a tierras altas. Se emitieron avisos de tsunami para Hawai, Alaska y la costa del Pacífico de Estados Unidos.
El primer ministro Ariel Henry y otros funcionarios del gobierno vestidos con trajes negros visitaron el monumento coronado por una gran roca que conmemora a las víctimas del temblor de magnitud 7,0 que sacudió al país el 12 de enero de 2010.
“No queremos que la gente se vuelva complaciente simplemente porque han habido terremotos fuertes y no causaron tsunamis”, dijo Zidek. “Eso no significa que el próximo terremoto no vaya a provocar uno”.
El temblor ocurrió a las a las 11.10 hora local (17.10 GMT) a 23 kilómetros de profundidad y su epicentro se localizó en alta mar, 64 kilómetros al suroeste del balneario El Tránsito, en el departamento de León, en el océano Pacífico, detalló el Ineter en un informe.
El terremoto de magnitud 6,9 se registró a las 01:45 en una zona montañosa de la provincia de Qinghai que está a 3.659 metros sobre el nivel del mar. Se sintió a 140 kilómetros (85 millas) al sureste, en Xining, la capital regional, donde algunas personas salieron corriendo de casas y edificios.
En 1886, esa ciudad costera fue azotada por el terremoto de mayor magnitud del que se tenga registro en la historia del sureste de Estados Unidos, según funcionarios. Ese temblor, que se cree tuvo una magnitud de al menos 7, dejó decenas de muertos y destruyó cientos de edificios.
El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, firmó este viernes una nueva orden ejecutiva que establece la ley seca y el cierre de comercios desde las 12 de la medianoche hasta las 5 de la mañana para frenar los contagios de la covid-19.
Indonesia canceló el martes una alerta de tsunami tras un sismo submarino de magnitud 7,3 que azotó las costas de la Isla de Flores. El temblor desató el pánico en una zona propensa a los terremotos mortales, pero no dejó daños ni víctimas.
El último domingo, un fuerte terremoto de magnitud 7,5 en la escala de Richter sacudió el norteño departamento de Amazonas y causó la muerte de un niño de 3 años; dejó además 17 heridos y alrededor de 4,200 damnificados, según el último reporte ofrecido este viernes por el COEN.
