El caso Pedrajas aceleró otras investigaciones judiciales por otros abusos sexuales cometidos por religiosos. La abogada Susana Inch, de la Conferencia Episcopal de Bolivia, dijo recientemente que al menos 12 casos de supuesto abuso sexual cometidos por curas están en curso en la justicia.
Un proceso de consultas entre católicos de todo el mundo arrojó pedidos para que la Iglesia tome pasos para incluir a mujeres en puestos de toma de decisión, acepte una “inclusión radical” de la comunidad LGBTQ+ y modifique la autoridad de los obispos.
En una carta de respuesta al presidente de Bolivia, el papa Francisco dijo sentirse avergonzado y consternado por las denuncias de abusos sexuales cometidos por sacerdotes en Bolivia y comprometió “la total disponibilidad de la Iglesia para trabajar junto al gobierno” en las investigaciones.
Los jesuitas, la orden religiosa a la que pertenece el papa Francisco, anunciaron el jueves la expulsión de un conocido sacerdote esloveno de la congregación tras acusaciones de abusos sexuales, espirituales y psicológicos contra mujeres adultas.
La semana pasada la justicia sentenció a un sacerdote por abuso a una menor y a inicios de mes otro cura fue enviado a la cárcel preventivamente por el abuso a seminaristas. Otro sacerdote español también fallecido tiene una denuncia, según informó la orden de los Jesuitas en Bolivia.
El papa Francisco advirtió el sábado a los misioneros que recaudan fondos para el Vaticano que no permitan que la corrupción financiera se infiltre en su trabajo, insistiendo en que la espiritualidad y la difusión del Evangelio deben impulsar sus operaciones, no el mero espíritu empresarial.
“Indudablemente es algo horrible lo que ha pasado en el seno de la Iglesia, pero salvo algunos intereses que han querido interpretar que los hechos han sido de toda la institución, no afectó en más. Una parte del gobierno quiere aprovechar para debilitar a la Iglesia católica”, según Cajías.
Los jesuitas en Bolivia han sido blanco de críticas desde que el periódico español El País publicó hace unas semanas extractos de un diario del sacerdote Alfonso Pedrajas en el que reconocía al menos 85 abusos contra menores en las décadas de 1970 y 1980 en internados católicos.
Así lo expresaron los obispos bolivianos en un comunicado que se conoció el miércoles, un día después del arribo a Bolivia del enviado del Papa Francisco, Jordi Bertemeu, uno de los principales investigadores del Vaticano sobre delitos sexuales.
El fiscal general de Illinois dio a conocer el martes los resultados de una amplia investigación sobre las denuncias de abuso sexual por parte de la Iglesia católica, y dijo que los investigadores encontraron que 451 miembros del clero abusaron sexualmente de casi 2,000 niños desde 1950.
En una rueda de prensa a su llegada acusó a tres jesuitas de haber encubierto los presuntos abusos. “No es suficiente pedir perdón, estos abusos no pueden quedar en la impunidad, debe haber reparación a las víctimas y estoy acá para que estos hechos dolorosos nunca más se repitan”
El papa Francisco viajará a Portugal en la primera semana de agosto por el Día Mundial de la Juventud y hará una parada en el popular santuario de Fátima, según indicó el Vaticano el lunes.
Un cura boliviano fue enviado a prisión preventiva por sospechas de abusos a seminaristas hace diez años, una semana después de que se destapara el mayor escándalo de pederastia en el país andino cometido hace tres décadas por un jesuita ya fallecido.
La carta reconoce que se han tomado algunos pasos iniciales, pero enfatiza que se necesita hacer más y que se debe enviar “una clara señal a los perpetradores y obispos que no cumplieron con sus responsabilidades y quienes, hasta cierto punto, todavía hoy no lo han hecho”.
No hubo evidencias de irregularidades financieras ni de abusos sexuales. Pero exempleados describieron un ambiente laboral tóxico en que empleados eran hostigados y humillados.
Un importante cardenal del Vaticano defendió los despidos “drásticos” del papa Francisco del liderazgo de la preeminente organización benéfica de la Santa Sede, cuando dijo el viernes que eran necesarios para el bienestar del personal de Caritas Internationalis y no una condena de su trabajo.
La organización benéfica más conocida del Vaticano, Caritas Internationalis, espera abrir un nuevo capítulo esta semana luego de que el papa Francisco cesó a sus principales dirigentes por denuncias de acoso.
El papa Francisco trató de alentar a su asediada junta asesora de protección infantil el viernes, luego de semanas de agitación provocadas por la más reciente renuncia de un miembro fundador y nuevas dudas sobre su dirección.
La Conferencia Episcopal de Bolivia se comprometió a cooperar con la investigación de una presunta serie de abusos cometidos por un cura jesuita español ya fallecido, pero pidió públicamente que el caso no se politice.
Un juez federal que supervisa la quiebra de la Iglesia Católica de Nueva Orleans se recusó una semana después que The Associated Press reveló que donó decenas de miles de dólares a la arquidiócesis y falló consecuentemente a favor de la iglesia en el caso de casi 500 víctimas de abusos sexuales.
