Desmoralizadas tras varios días encerradas en su casa por temor al nuevo coronavirus, Shahpar Hashemi y su hija Parmis decidieron finalmente salir de compras en las calles inhabitualmente calmas de Teherán.
A pesar de que hubo dos crisis anteriores relacionadas con coronavirus, el mundo realmente no ha invertido en medios para combatirlos, lamentan investigadores, que esperan que la nueva epidemia sea la "última señal de alarma" para prepararse para las siguientes.
Mientras que las infecciones del virus que causa la enfermedad COVID-19 van surgiendo en otros países, incluso una tasa baja de fallecimientos puede representar muchas víctimas a la larga, y resulta crucial comprender por qué un lugar presenta un mejor escenario que otro.
El presidente Donald Trump declaró que un extenso brote en Estados Unidos del nuevo virus respiratorio que afecta al mundo no es inevitable, incluso mientras autoridades de salud a su lado advertían a los estadounidenses que habrá más infecciones.
El Ministerio de Salud de Brasil confirmó el miércoles que un brasileño de 61 años que viajó a Italia este mes se convirtió en el primer caso del nuevo coronavirus en Latinoamérica.
El coronavirus continúa su rápida propagación fuera de China. Corea del Sur ha informado este lunes de 161 nuevos casos en su territorio, elevando el total a 763. El país asiático también ha confirmado el fallecimiento de un séptimo paciente de Covid-19, la enfermedad provocada por el patógeno.
Hay cerca de 500 personas portadoras del nuevo coronavirus en cárceles chinas, y poco más de 200 de los contagios se dieron fuera de la provincia en el centro de la epidemia, dijeron autoridades el viernes, mientras que Corea del Sur reportó 100 nuevos casos que duplicaron sus infecciones.
La histórica votación coloca a Portugal cerca de convertirse en uno de los pocos países del mundo que permiten los procedimientos. Sin embargo, el presidente portugués Marcelo Rebelo de Sousa aún podría tratar de frenar la medida.
Muestra los esfuerzos de China para mejorar su sistema nacional de gestión de emergencias de salud pública en forma de leyes para prevenir y controlar enfermedades infecciosas, asumiendo China sus responsabilidades como gran país, lo cual es de gran importancia para China y el mundo, agregó Ren.
Durante las últimas dos semanas, la policía china ha allanado casas, restaurantes y mercados informales ââen todo el país, arrestando a casi 700 personas por violar la prohibición temporal de capturar, vender o comer animales salvajes.
Hermes Soto cumple el lunes cinco años y no tendrá fiesta. Lo pasará en el hospital infantil a donde debe ir a recibir su decimoquinta quimioterapia para tratar el cáncer que padece: un agresivo rabdomiosarcoma en el antebrazo izquierdo.
La enfermedad COVID-19, derivada de esta nueva forma de coronavirus, se ha extendido a 24 países desde diciembre, cuando surgieron las primeras infecciones en el centro de China. En todo el país hay 66,492 casos confirmados,
l balance general de la epidemia de COVID-19 superó el sábado la barrera de los 1,500 muertos en China, con 138 nuevas víctimas en Hubei, luego de una jornada en que se confirmó el primer caso en un país africano. Así mismo reportó 139 nuevos decesos en esa región en las previas 24 horas.
En su comunicado de este viernes, el Ministerio de Sanidad ha informado de que en la jornada del jueves se registraron 121 muertes y 5.090 casos confirmados por coronavirus y ha situado el balance en 1.380 fallecidos y 63.851 contagiados.
El señor Zhang estos días se siente mucho más aliviado. Su esposa, Zhan Guifang, de 56 años, está por fin ingresada en un hospital. El matrimonio reside en el barrio de Baibuting, en Wuhan. Creen que ella se infectó cuando compraba verduras. Tuvieron que esperar más de doce días para el ingreso.
Algunos enfermos de epilepsia están permitiendo que los médicos, durante la operación, les extraigan trozos minúsculos de sus cerebros para analizarlos, con la esperanza de que arrojen luz sobre el funcionamiento cerebral y abran la posibilidad de nuevos tratamientos.
Un total de 10.596 trabajadores de la salud han sido enviados a la provincia de Hubei, donde se encuentra la localidad de Wuhan, epicentro del brote del nuevo coronavirus, para ayudar a controlar la epidemia, que ya ha dejado 636 muertos y 31.161 afectados en el país asiático.
“La última vez que tanta gente estaba despierta era 1989”, escribía un usuario de Weibo el jueves por noche, mientras se esperaban noticias sobre la salud del doctor Li Wenliang, el oftalmólogo que contribuyó a dar la alarma sobre la epidemia de coronavirus en China.
El Instituto de Virología Wuhan, dirigido por el gobierno, dijo esta semana que solicitó la patente en enero junto con un laboratorio militar. Un comunicado del instituto reconoció que había “barreras de propiedad intelectual”, pero que actuaba para “proteger los intereses nacionales”.
China tomará una serie de medidas para garantizar el suministro de recursos médicos claves y artículos de primera necesidad para intensificar la prevención y control de la epidemia e incrementará la producción de los recursos médicos requeridos con urgencia.
