MUY OPORTUNO
Por qué te abates, oh alma mía
Cierto predicador dijo: «Cuando eres un hombre maduro en Dios estarás roto en mil pedazos». Esto es cien por ciento cierto, puesto que cada dolor, cada prueba nos va marcando, pero esas marcas nos dan madurez y esa madurez nos da esperanza para confiar más en Dios.