VALORES MORALES
Del amor líquido y otras paradojas
Este proceso de selección no puede compararse con el enamoramiento, ni con la pérdida de sí que siempre acarrea, ni tampoco con el éxtasis o esa especie de arrobamiento casi divino, como le llamara Platón. Uno se expone en el tablón de anuncios como un objeto para ser alquilado un fin de semana.