La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) ordenó a Boeing detener la producción de los aviones 737 Max, pero despejó el camino para que el Max 9 del fabricante volviera al servicio casi tres semanas después de que un tapón de puerta explotara durante un vuelo de Alaska Airlines.
La Comisión Europea anunció este martes la apertura de una investigación en profundidad sobre la compra por parte de la aerolínea alemana Lufthansa de una participación minoritaria de la compañía de bandera italiana Ita Airways, nacida de la quiebra de Alitalia y con financiación del Estado.
United Airlines dijo este lunes que ha encontrado tornillos sueltos en sus aviones Boeing 737 Max 9, el modelo inmovilizado por las autoridades después de que este pasado sábado uno de los aparatos, operado de Alaska Airlines, perdiera parte del fuselaje en pleno vuelo.
Reguladores estadounidenses dijeron el domingo que ciertos aviones fabricados por Boeing permanecerían en tierra hasta que se considere seguro volar nuevamente, mientras las autoridades realizan una búsqueda cerca de Portland, Oregón, para encontrar un panel faltante que se desprendió de un avión.
La aerolínea estadounidense United Airlines está estudiando aprovechar la información de sus pasajeros para mostrarles anuncios personalizados durante el vuelo o en la aplicación donde compran los billetes, según adelanta este miércoles The Wall Street Journal.
Antes de la reanudación, United dijo en un comunicado que la aerolínea y sus subsidiarias estaban “experimentando un problema tecnológico sistémico y estamos reteniendo a todas las aeronaves en sus puertos de partida. Los vuelos ya en el aire están continuando a su destino planeado”.
La Administración de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (TSA, por sus siglas en inglés) dijo el martes que controló a 2,785 millones de pasajeros de líneas aéreas el 16 de junio, la cifra más alta desde antes de la pandemia del COVID-19.
Son innumerables los viajeros que han experimentado la sensación de ansiedad que provocan las turbulencias en los vuelos: ojos entrecerrados, manos que se aferran a los reposabrazos como si su vida dependiera de ellos, preparándose para la montaña rusa que se avecina.
La Administración Federal de Aviación (FAA) levantó la orden de mantener en tierra todos los vuelos en Estados Unidos, luego de una falla informática el miércoles temprano que obligó a demorar o cancelar miles de vuelos en todo el país.
La compañía United Airlines ha formalizado un pedido que calificó de "histórico" de cien aviones de gran capacidad, del tipo Dreamliner de Boeing, con opción a compra de otros cien más, con los que pretende "reforzar el dominio de la compañía en el tráfico global en los años venideros".
Las compañías aéreas de Estados Unidos cancelaron 1.220 vuelos a primera hora del jueves, cuando la tormenta tropical Nicole tocaba tierra en la costa este de Florida, alterando las operaciones y obligando a cerrar los aeropuertos de la región.
Animada por la fuerte demanda de viajes internacionales durante este verano, la aerolínea United Airlines planea incrementar aún más sus corridas de viajes de Estados Unidos a Europa para el próximo año.
Los ingresos de American subieron 12% en comparación con el mismo trimestre de 2019, previo a la pandemia, llegando a 13,400 millones de dólares en el trimestre de abril a junio, su mejor cifra en la historia.
Dufry, que opera unas 2,200 tiendas en aeropuertos, cruceros, puertos marítimos y otros lugares turísticos de todo el mundo, dijo que vio una recuperación particularmente fuerte en la región de Europa, Oriente Medio y África, donde sus ventas se triplicaron con respecto al año anterior.
United Airlines dijo el martes que espera que sus aviones Boeing 777 equipados con motores Pratt & Whitney (PW) vuelvan al servicio la próxima semana.
United dijo que ofrecerá una combinación de destinos nuevos y viejos favoritos, como Londres. A finales de esta semana, United comenzará a prestar servicios en varios destinos nuevos que nombró el otoño pasado, como las Azores en Portugal y las Islas Canarias en España.
La administración de Joe Biden ha estado recientemente bajo la presión de quienes piden flexibilizar o anular la obligación de llevar tapabocas. Unos 20 estados dirigidos por republicanos y varias aerolíneas pidieron el fin de este medida en aviones y otros transporte públicos.
El combustible es su segundo mayor gasto tras la mano de obra, pero las principales aerolíneas estadounidenses no se cubren contra la volatilidad de los precios del petróleo, como la mayoría de sus pares europeos. El sector suele tratar de compensar los costos de combustible con tarifas más altas.
"Esto significa que en un día como ayer, más de 1,100 vuelos y 100,000 pasajeros estaría sujeto a cancelaciones, desvíos o retrasos", apuntó. La acción es urgente, agregaron en la carta firmada también por UPS Airlines, JetBlue Airways y FedEx Express.
Las aerolíneas estadounidenses informaron el martes que China ha impedido que más de una decena de vuelos recientes y futuros ingresen ese país, el cual ha endurecido sus ya de por sí estrictas restricciones de viaje relacionadas con el COVID-19.
