La Casa Blanca defendió hoy la propuesta del presidente estadounidense, Donald Trump, de deportar a inmigrantes indocumentados sin darles la oportunidad de comparecer previamente ante un juez y argumentó que eso no viola su derecho al debido proceso.
El presidente de EU, Donald Trump, propuso hoy privar a los inmigrantes indocumentados de su derecho a comparecer ante un juez y consideró que deben ser deportados "inmediatamente" tras cruzar la frontera, lo que supondría una violación del principio de debido proceso.
El Gobierno de Donald Trump sufre una mayúscula crisis política por su polémica directiva de separar a padres e hijos inmigrantes cuando cruzan ilegalmente la frontera de México a Estados Unidos.
La primera dama de EU, Melania Trump, "odia" la separación de niños de sus familias tras cruzar ilegalmente la frontera sur del país, que afecta a al menos 2,000 menores y es consecuencia directa de la política migratoria de su marido, el presidente, Donald Trump.
El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, anunció hoy que no suspenderá un programa que proporciona asesoría legal a los indocumentados, rectificando así una decisión de principios de mes para terminarlo.
El gobernador demócrata dice que le interesa colaborar en la lucha contra las bandas transnacionales y los traficantes de drogas y de armas, pero rompió con sus colegas republicanos de los otros tres estados al insistir en que sus soldados no harán cumplir las leyes de inmigración.
Rubricaron la misiva los legisladores Adam Smith, miembro del Comité de Servicios Armados, Bennie Thompson, del Comité de Seguridad Nacional, Jerrold Nadler, integrante del Comité Judicial y Elijah Cummings, perteneciente al Comité de Reforma y Supervisión del Gobierno.
El jueves, Trump elogió a Brown en Twitter, pero no opinó sobre los comentarios del gobernador en cuanto a la inmigración. Brown, dice el mensaje, "está haciendo lo correcto al enviar a la Guardia Nacional a la frontera. ¡Gracias Jerry, buena decisión para la seguridad de nuestro país!".
La construcción del tramo de muro y el compromiso de Arizona, Nuevo México y Texas de enviar al menos 1,600 miembros de la Guardia Nacional provocó una nueva ola de críticas por parte de activistas migratorios.
Trump no es el primer presidente estadounidense que envía militares a la frontera con México: en 2006, George W. Bush ordenó desplegar allí a unos 6,000 miembros de la Guardia Nacional, y Barack Obama destinó a 1,200 efectivos de ese mismo cuerpo en 2010.
La orden del presidente de estados Unidos Donald Trump de enviar desde anoche a la Guardia Nacional a los estados de Arizona y Texas, en la frontera con México es, a juicio de expertos, una acción "estridente, tardía y sin sustento".
Arizona y Texas anunciaron el viernes que se aprestan a desplegar efectivos de la Guardia Nacional en la frontera de Estados Unidos con México ante el llamado del presidente Donald Trump de aumentar la seguridad en la zona.
El plan del presidente Donald Trump de desplegar efectivos de la Guardia Nacional en la frontera con México enfrenta la oposición de algunos gobernadores, en su mayoría demócratas, aunque éstos podrían carecer de la autoridad para rechazar la solicitud del comandante en jefe de que aporten soldados
La vía tradicional de fuga hacia el norte _el llamado "ferrocarril subterráneo"_ era demasiado larga para los esclavos, de manera que miles buscaban su libertad cruzando la frontera sur. Una guerra sorda se desarrolló entre los dos países.
El mensaje fue publicado horas después de que Trump firmó una orden ejecutiva para desplegar a soldados de la Guardia Nacional en la frontera con México para ayudar en labores de seguridad. Trump firmó la proclama asegurando que la situación de la inmigración ilegal ha alcanzado un "punto crítico".
El presidente estadounidense, Donald Trump, firma hoy una orden para desplegar "lo antes posible" un número no determinado de militares de la Guardia Nacional en la frontera con México, en un intento de marcar músculo ante lo que considera un aumento intolerable de la inmigración ilegal.
El fiscal general de EU, Jeff Sessions, vinculó hoy la decisión de desplegar la Guardia Nacional en la frontera sur del país con la caravana de migrantes centroamericanos que recorre México y que ha sido objeto de ataques por parte del presidente, Donald Trump.
"Hasta que podamos tener un muro y seguridad adecuada, vamos a estar vigilando nuestra frontera con nuestras Fuerzas Armadas. Ése es un gran paso", dijo Trump a los periodistas durante un almuerzo con los presidentes de Letonia, Raimonds Vejonis; Estonia, Kersti Kaljulaid; y Lituania, Grybauskaite.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, utilizará a la Guardia Nacional si finalmente pone en práctica su plan de militarizar la frontera sur con México hasta que se construya el muro, dijo a Efe una fuente de la Casa Blanca.
México pidió hoy explicaciones al Gobierno estadounidense sobre los planes del presidente Donald Trump de encargar a las Fuerzas Armadas de EU la protección de la frontera sur del país hasta que se construya allí un muro.
