Alrededor de 240 musulmanes rohinya, entre los que había mujeres y niños, esperaban en el mar ante la costa de Indonesia tras dos intentos de desembarcar frustrados por residentes locales.
Al menos 40,000 migrantes cruzaron el río Suchiate, que separa México de Centroamérica, en la última ola migratoria, de agosto a octubre, informó este jueves a EFE Luis Rey García Villagrán, coordinador del Centro de Dignificación Humana, asociación civil de la frontera sur del país.
La Corte Suprema británica concluyó el miércoles que el controversial plan del gobierno de enviar algunos migrantes a Ruanda es ilegal, un varapalo para una medida estrella del gobierno del primer ministro, Rishi Sunak, que ha recibido atención y críticas a nivel internacional.
Desde hace décadas, la guerra y la inestabilidad han llevado a millones de afganos a emigrar. Ahora, Kabul y Teherán mantienen conversaciones sobre la situación de estas personas en Irán.
Pakistán abrió el lunes tres nuevos cruces fronterizos para agilizar la deportación de afganos que están viviendo en el país sin autorización legal, informaron las autoridades.
Más de 250,000 afganos han abandonado Pakistán en las últimas semanas mientras el gobierno acorralaba, detenía y expulsaba a extranjeros sin documentos de ingreso válidos. El gobierno fijó el 31 de octubre como fecha límite para que los migrantes sin estatus legal abandonaran el país.
La caravana de varios miles migrantes que avanza por el estado de Chiapas tomó el miércoles la principal aduana del sur de México para presionar a las autoridades migratorias para que les entreguen permisos de tránsito por el país.
El gobierno de Estados Unidos pidió el martes a un tribunal de apelaciones que permita que las nuevas y radicales restricciones al asilo permanezcan vigentes, y advirtió que su retiro sería “altamente problemático” en la frontera.
Más deportaciones, beneficios sociales en especie y no en dinero en efectivo, más trabajo comunitario: Alemania se propone endurecer las condiciones para los solicitantes de asilo. Muchos estados alemanes informan que están "sobrepasados" por la llegada de solicitantes de asilo.
El canciller Olaf Scholz y los 16 gobernadores estatales de Alemania llegaron a un acuerdo el martes sobre normas más estrictas para limitar el alto número de migrantes que llegan al país, consiguiendo consenso en un tema que se ha convertido en un enorme problema político para el gobierno.
Cientos de miles de afganos han abandonado Pakistán mientras las autoridades persiguen a extranjeros que, dicen, se encuentran en el país sin autorización legal, yendo de puerta en puerta para comprobar su documentación. Pakistán fijó el 31 de octubre como fecha límite para abandonar el país.
Desde el 1° de noviembre, inmigrantes y refugiados indocumentados afganos y de otras nacionalidades están a conminados a abandonar Pakistán. Esto afecta también a personas que viven desde hace décadas en el país.
Agencias internacionales de ayuda advirtieron el jueves de las escenas de caos y desesperación entre afganos que regresaron a su país desde Pakistán, donde las fuerzas de seguridad arrestaban y deportaban a los extranjeros no registrados o sin permiso para estar en el país.
Las fuerzas de seguridad paquistaníes detuvieron y deportaron el miércoles a docenas de afganos que no tenían autorización para permanecer en el país, tras expirar un plazo límite marcado por el gobierno para que se marcharan, según las autoridades
El gobierno alemán ha aprobado un proyecto de ley que permitiría a los solicitantes de asilo empezar a trabajar antes y endurecería los castigos a los contrabandistas de migrantes.
A horas de expirar plazo que Pakistán dio a refugiados indocumentados para abandonar el país, el caos impera en pasos fronterizos con Afganistán, donde cientos de camiones cargados con miles de personas buscan salir.
Un gran número de afganos se hacinaron el martes en camiones y buses en Pakistán para cruzar la frontera y regresar a su país horas antes de que finalice el plazo dado por el gobierno paquistaní para que quienes están en el país sin los permisos adecuados se marchen antes de ser deportados.
Un gran número de afganos se hacinaron el martes en camiones y buses en Pakistán para cruzar la frontera y regresar a su país horas antes de que finalice el plazo dado por el gobierno paquistaní para que quienes están en el país sin los permisos adecuados se marchen antes de ser deportados.
Pakistán está creando centros de deportación para los migrantes que están en el país de forma ilegal, entre los que se estima que hay 1,7 millones de afganos, dijeron las autoridades el jueves.
"La cifra de desplazados por guerra, persecución, violencia y violaciones de DD.HH. supera ya los 114 millones", informa ACNUR, con miras al Foro Global de Refugiados (FGR), en Ginebra del 13 al 15 de diciembre.
