Sólo se permitió la entrada de 20 camiones, una cantidad que los trabajadores de salud dijeron que era insuficiente para hacer frente a la crisis humanitaria sin precedentes que se vive en Gaza. Más de 200 camiones con aproximadamente 3,000 toneladas de ayuda llevan días estacionados.
En Berlín, cientos de manifestantes propalestinos se habían reunido a pesar de la prohibición de reuniones, atacaron e hirieron a policías y bomberos. También hubo concentraciones en otras ciudades europeas contra el accionar de Israel frente a la organización islamista palestina Hamás.
Guterres, ha pedido este sábado a los líderes internacionales reunidos en El Cairo que negocien un alto el fuego inmediato entre Hamás e Israel y pongan fin a la "maldita pesadilla" que está siendo este nuevo conflicto en una región que se encuentra, una vez más, "a un paso del precipicio".
Más de 200 camiones cargados con unas 3,000 toneladas de ayuda llevaban días estacionados junto al puesto fronterizo. Pero el medio estatal egipcio Al-Qahera, próximo a las agencias de seguridad, dijo que apenas 20 habían cruzado a Gaza el sábado.
Para muchos desplazados, las tensiones actuales traen recuerdos de la brutal guerra de un mes entre Hezbollah e Israel en 2006, durante la cual la aviación israelí arrasó con varias aldeas en el sur del Líbano y en los suburbios al sur de Beirut.
"Una de las razones por las que han actuado como han actuado, por la que Hamás se movió en contra de Israel, es porque sabían que yo iba a sentarme con los saudíes", "los saudíes querían reconocer a Israel y que eso, de hecho, habría unido Oriente Medio".
Las últimas grandes manifestaciones contra el presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, se produjeron en septiembre de 2019 cuando miles de personas salieron a las calles para pedir la "caída del régimen", retomando la emblemática consigna de la Primavera Árabe: "El pueblo quiere que caiga el régimen"
Los ministros de asuntos exteriores de Israel y Colombia sostuvieron el viernes una conversación telefónica, luego de las tensiones diplomáticas que generaron entre los dos países las declaraciones del presidente colombiano, Gustavo Petro, sobre la guerra Israel-Hamas.
Muchos habitantes de Gaza, que ahora comen apenas una vez al día y carecen de agua suficiente para beber, esperan desesperadamente la ayuda. No estaba claro si se permitiría el paso de combustible para alimentar los generadores de los hospitales.
El contralmirante Daniel Hagari, portavoz militar israelí, dijo que Israel seguía trabajando para devolver a los rehenes y encontrar a los desaparecidos, y que sus objetivos no han cambiado. “Continuamos la guerra contra Hamas y estamos listos para la siguiente fase de la guerra”, afirmó.
"Los ataques de 7 de octubre han abierto profundas heridas en la comunidad judía en Estados Unidos (...) debemos acabar con el antisemitismo y la islamofobia", ha remachado Biden, que también ha recordado al niño palestino asesinado recientemente en Chicago por ser musulmán.
La semana pasada, el influyente clérigo ya logró que decenas de miles de sus fieles se congregaran en la plaza Tahrir de Bagdad, en la capital iraquí, para protestar por los ataques israelíes sobre la Franja de Gaza, que según Hamás ha dejado ya más de 4,100 muertos y 13,200 heridos.
Baqueri ha advertido sobre las "consecuencias" de esta situación y ha reclamado "adoptar acciones serias para evitar la continuación de los brutales ataques del régimen sionista contra civiles en Gaza y entregarles ayuda humanitaria, incluida comida y medicinas".
Este ataque se suma a otro ejecutado el jueves contra la iglesia ortodoxa griega de San Porfirio, la más antigua en la Franja, que se saldó con la muerte de al menos ocho personas. El edificio, que servía como refugio para cientos de desplazados, ha sufrido graves daños materiales.
Asimismo, el Ejército israelí ha anunciado un plan de evacuación de los residentes de Kiryat Shamona, que se encuentra cerca de la frontera con Líbano, mientras que el Gobierno de Líbano, aprobó el jueves un plan de emergencia para reforzar la seguridad de las principales infraestructuras.
Así las cosas, el representante de la diplomacia rusa en Israel ha advertido de que las cifras pueden aumentar en todos los aspectos --tanto los fallecidos, como los rehenes y los desaparecidos-- debido a que "ni siquiera la parte israelí tiene todos los datos".
El Ejército mantiene como desaparecidas a entre 100 y 200 personas, y ha indicado que aproximadamente 300 de los 1,400 fallecidos todavía siguen sin identificar, de acuerdo con el responsable de las operaciones de inteligencia sobre secuestrados, el general Nitzan Alon, al 'Times of Israel'.
Ambos coincidieron además en la necesidad de que "todas las partes adopten medidas para proteger a los civiles y la infraestructura civil y minimizar la pérdida de vidas inocentes", mientras al mismo tiempo "condenaron el terrorismo de Hamás y subrayaron que no representa al pueblo palestino".
Laerke ha incidido además en que, además de comida, agua y medicinas, es necesario entregar combustible a Gaza, que se encuentra sin electricidad a causa de la inacción de los generadores. "El combustible es un bien humanitario que salva vidas en esta crisis", ha destacado el portavoz de la OCHA.
El secretario de Naciones Unidas, António Guterres, ha exigido este viernes desde el paso la apertura inmediata del cruce para que los camiones con ayuda humanitaria "avancen urgentemente y lo antes posible" hacia el enclave palestino.
