“No estamos fuera de peligro”, comentó Scott. “Esto no está ni cerca de terminar”. Tuiteó que no había paso en los caminos alrededor de su hogar el martes por la mañana, por lo que tuvo que atravesar el bosque para llegar al centro de respuesta de emergencias del estado.
Una tormenta se alejaba el martes tras dejar la lluvia de dos meses en Vermont y saturar otras zonas del nordeste, aunque se esperaban más inundaciones después de que el agua cortara el acceso a algunas poblaciones, incluida la vía principal a la capital del estado.
Las escuelas de Nueva Delhi cerraron el lunes debido a unas intensas lluvias del monzón, que castigaron la capital india y provocaron aludes de tierra e inundaciones en el norte del país, con al menos 15 muertos en los últimos tres días.
El área se encuentra en una sección escasamente poblada del valle del río Yellowstone, rodeada de ranchos y tierras de cultivo. El río fluye desde el Parque Nacional de Yellowstone, que se encuentra aproximadamente a 177 kilómetros (110 millas) al suroeste.
En la cordillera de la Región Metropolitana, donde se ubica Santiago, ha llovido en zonas donde normalmente cae nieve, lo que puede ocasionar que las precipitaciones remuevan masas sólidas de ramas, piedras y tierra, entre otros elementos, lo que puede afectar a localidades más abajo.
Ocho personas murieron y 19 estaban desaparecidas en el estado brasileño de Rio Grande do Sul tras el paso de una tormenta invernal, informaron el sábado las autoridades del estado sureño. Los expertos dijeron que la tormenta fue un ciclón extratropical.
El viernes dos trenes de pasajeros chocaron alrededor de las 7:00 p.m. hora local después de que uno de ellos se estrellara a toda velocidad contra un tren de carga estacionado a toda velocidad y descarrilara en el distrito de Balasore del estado de Odisha, según un informe inicial del gobierno.
La tormenta tropical Mawar intensificó las fuertes lluvias que caían el viernes sobre el principal archipiélago de Japón, detuvo los trenes y el tránsito y amenazaba con inundaciones y deslizamientos de tierra en las regiones del sur y el oeste.
Al menos 10 personas fallecieron el martes y otras 55 resultaron heridas cuando un autobús que llevaba a peregrinos hindúes a un santuario en la zona de Cachemira controlada por India cayó desde un puente de la autopista a un desfiladero en el Himalaya, dijo la policía.
Las autoridades en el norte de Italia advirtieron el miércoles a la población que se mantuviera en terrenos altos, entre temores de que los ríos crecidos volvieran a desbordarse después de que las inundaciones mataran al menos a cinco personas y forzaran la evacuación de unas 5,000.
Dos docenas de personas, muchas de ellas niños, resultaron heridas el jueves al derrumbarse una pasarela provisional de peatones en la ciudad finlandesa sureña de Espoo, según policías y medios.
Fuertes lluvias en el suroeste de Alemania provocaron inundaciones en carreteras y sótanos, forzaron interrupciones en rutas ferroviarias y atraparon a algunas personas en casas que quedaron rodeadas de agua.
Una persona murió y 19 personas fueron hospitalizadas, según los servicios de emergencia, después de que un tren de pasajeros chocara el martes de madrugada con una grúa de construcción y descarrilara cerca de La Haya. El impacto lanzó dos de los vagones a un campo junto a las vías.
Treinta y seis cuerpos han sido recuperados de un enorme pozo en un templo hindú del centro de la India luego de que decenas de personas que asistieron a un festival cayeron a las aguas turbias cuando su cubierta colapsó, informaron el viernes autoridades.
Una estructura construida sobre el pozo de un templo antiguo en la India se derrumbó el jueves cuando una multitud de feligreses rezaba en un festival de Rama, una de las deidades indias más veneradas, y murieron al menos 11 personas, informaron las autoridades.
A fines de febrero las autoridades habían alertado sobre el riesgo de movimientos de tierra en esa zona debido a la intensa temporada de lluvias y habían habilitado albergues en al menos seis municipios. Hasta allí están llegando víveres desde otras partes del país para alimentar a los refugiados.
Decenas de rescatistas buscaban el martes a posibles sobrevivientes de un gigantesco alud de tierra, lodo y rocas que sepultó al menos a medio centenar de viviendas en Alausí, en el centro sur de Ecuador, con un saldo inicial de siete fallecidos y decenas de desaparecidos.
Las precipitaciones se incrementaron las últimas semanas en Lima, una ciudad donde históricamente llueve poco. La inusual caída de agua provocó una treintena de aludes en diversas zonas de la capital que inundaron con fango las casas por donde discurría la masa de tierra y piedras.
Este miércoles, el Gobierno de Dina Boluarte decretó el estado de emergencia en los distritos costeros limeños de Santa María del Mar, Punta Negra, San Bartolo, Ancón, Punta Hermosa y Pucusana, por los daños causados en viviendas y otras infraestructuras.
La tormenta abarcó partes de Nueva Inglaterra, el norte del estado de Nueva York, el noreste de Pensilvania y el norte de Nueva Jersey. Se tiene previsto que los totales de nieve una vez que se disipe el miércoles vayan desde unos cuantos centímetros hasta más de medio metro, dependiendo de la zona
