La inteligencia artificial plantea un "riesgo de extinción" comparable al de las pandemias o la guerra nuclear, advierte este martes en una carta un grupo de más de 300 expertos e investigadores de la industria, entre los que se encuentran el director ejecutivo de Google DeepMind, Demis Hassabis.
Científicos y directivos de Microsoft, Google y otras empresas de la industria tecnológica emitieron una nueva advertencia el martes sobre los peligros que representa la inteligencia artificial para la humanidad.
Reid Hoffman, un emprendedor multimillonario e inversionista de capital de riesgo, está preocupado por la inteligencia artificial… pero no por las razones catastrofistas que aparecen en los titulares. Más bien, le preocupa que los titulares catastrofistas sean demasiado negativos.
Meta Platforms Inc., propietario de Facebook, recibió una multa récord de €1,200 millones (US$1,300 millones) en la Unión Europea por violación de la privacidad y se le dio un plazo para dejar de enviar datos de usuarios a Estados Unidos.
Los programas de detección existentes se están poniendo a prueba con ejemplos que son “muy distintos a lanzarse al mundo salvaje de la actualidad, donde las imágenes que circulan se han modificado, recortado, compactado, transcodificado, anotado y quién sabe qué otras cosas más”, comentó Farid.
El informe señala que en Roblox, una plataforma que permite a los usuarios crear mundos virtuales, los jugadores han recreado campos de concentración nazis y los campos de reeducación masivos que el gobierno comunista chino ha construido en Sinkiang, una región en su mayoría musulmana.
Las dos compañías anunciaron su acuerdo en 2021, pero ahora Meta y BMW dicen que lograron un gran avance al combinar datos del sensor de movimiento inercial (IMU) de un BMW en tiempo real con el sistema de seguimiento en las gafas de Project Aria de Meta.
El documento de investigación de Microsoft, llamado de manera provocadora “Sparks of Artificial General Intelligence” (Chispas de Inteligencia Artificial General), llega al núcleo de algo en lo que los tecnólogos han estado trabajando —y algo que han temido— durante décadas.
El uso de las tecnologías de la información digital, desde los motores de búsqueda a la inteligencia artificial de ChatGPT, plantea retos que deberían ser analizados por un panel intergubernamental similar al que existe en Naciones Unidas para el cambio climático.
"Ahora, el motor de búsqueda hace el trabajo pesado por usted", dijo Cathy Edwards, vicepresidenta de ingeniería de Google, durante la conferencia anual de desarrolladores I/O de la compañía en California la semana pasada.
Las búsquedas en internet, dominadas por Google en los últimos 25 años, se han vuelto tan cotidianas como las llamadas telefónicas, pero la ola actual de la inteligencia artificial (IA) generativa podría transformarlas radicalmente.
Las autoridades en todo el mundo se apresuran a redactar normas para inteligencia artificial. También en la Unión Europea, donde un borrador de legislación pasó por una votación crucial el jueves.
El mes pasado, Microsoft anunció un aumento de la cuota de mercado de Bing en Estados Unidos, que recientemente ha superado los 100 millones de usuarios activos diarios, aunque sigue siendo inferior a los miles de millones de búsquedas de Google.
El paso a la categoría de dispositivos plegables más caros marca un cambio de estrategia para Google, que hasta ahora se ha centrado en vender a un precio más bajo que los de dispositivos rivales.
Cuando el presidente Joe Biden anunció en octubre las fuertes restricciones a la venta de chips de computadora más avanzados a China, en parte explicó la decisión como una manera de ofrecerle a la industria estadounidense una oportunidad de recuperar su competitividad.
Tan pronto como ChatGPT empezó a funcionar, los hackers intentaron penetrar el chatbot de inteligencia artificial, intentando anular sus mecanismos de seguridad para que pudiera dar respuestas perturbadoras u obscenas.
El diccionario Merriam-Webster señala que una “caja de Pandora” puede ser “cualquier cosa que parezca ordinaria, pero que puede producir resultados perjudiciales impredecibles”.
La inteligencia artificial generativa se ha convertido en una palabra de moda este año, con aplicaciones que han captado la atención del público y han provocado una carrera entre las empresas para lanzar productos similares que creen que cambiarán la naturaleza del trabajo.
Me sentía abrumada por el trabajo e insegura sobre cómo estructurar mi día, un problema recurrente que a menudo me impide iniciar mis actividades. “Buenos días”, escribí en la aplicación. “¡No tengo tiempo suficiente para hacer todo lo que tengo que hacer hoy!”.
Geoffrey Hinton fue uno de los pioneros de la inteligencia artificial. En 2012, Hinton y dos de sus estudiantes de posgrado de la Universidad de Toronto crearon una tecnología que se convirtió en la base intelectual de los sistemas de IA que las empresas más grandes del sector consideran clave.
