7 consejos bíblicos para ser feliz
¿Quién no quiere ser feliz? ¿Quién quiere vivir en desgracia? He aquí una serie de consejos la mar de útiles para que se nos conceda esa dicha
¿Quién no quiere ser feliz? ¿Quién quiere vivir en desgracia? He aquí una serie de consejos la mar de útiles para que se nos conceda esa dicha
Un día, el burro de un aldeano se cayó a un pozo. El pobre animal estuvo rebuznando con amargura durante horas, mientras su dueño buscaba inútilmente una solución.
Nos molesta mucho cuando una persona hipócrita llega a nuestra vida, pero con qué facilidad caemos en este mal cuando ponemos máscaras y no nos mostramos como en verdad somos, cuando solamente buscamos aparentar ante los demás.
Mons. João Clá Dias, EP, al comentar el evangelio de San Juan que trata de la encarnación del Verbo, (1) explica qué significa la afirmación del Salvador, de que nos debemos convertir en infantes para entrar al Reino Celestial.
"Ese es un fariseo" o "no sea fariseo": son expresiones que todos hemos escuchado, y que tienen ‘sabor', que muerden, mucho más si se ajustan a la realidad de quien así es invectivado.
Es éste el penúltimo verso de la famosa oración-poesía de Santa Teresa que comienza por las palabras “Nada te turbe”. Este verso nos da, en su sencillez, claves importantes para la vida de oración y la vida espiritual.
En diversas ocasiones conviven ideas en conflicto. Algunas de esas ideas son defendidas por las mismas personas, que afirman a la vez A y B sin darse cuenta de que son ideas que chocan entre sí.
"La Iglesia confiesa su fe en el Ángel de la Guarda, venerándolo en la liturgia con una fiesta especial y recomendando buscar su protección con una oración frecuente".
Todos hemos sufrido, en más de una ocasión. En esos momentos de dolor, de sufrimiento, de desesperación por lo que está sucediendo, volteamos a lo alto, con el corazón desgarrado, y le preguntamos a Dios: ¿Por qué me está sucediendo esto?
Son seres espirituales, no corporales. Se les describe tradicionalmente como fuertes, con alas y sonrientes. Invisibles pero luminosos. Son los ángeles de la guarda o ángeles custodios. Son la ayuda precisa en el momento justo.
En primer lugar, ¿quiénes son los malos? Podría parecer muy fácil responder: todos los que dañan a los demás son los malos. Los seres humanos somos buenos por naturaleza, pues Dios nos hizo así. Con la edad y las experiencias de la vida vamos adquiriendo la noción de maldad y bondad.
Jesús en su ultimo mandato se dirigió no solamente a los Sacerdotes y diáconos, sino también a nosotros los laicos, que tenemos también el legítimo derecho de proclamar la Palabra de Dios.
En el matrimonio pueden crearse trampas disfrazadas de silencio que apartan a la pareja y crean abismos en su comunicación.
Hace pocos días, me encontraba rezando el rosario en una iglesia de San Pablo, cuando, sin darme cuenta, interrumpí la oración para analizar un personaje que acababa de entrar.
Cuando una pareja de novios vive la abstinencia sexual, su comunicación es buena porque no se centran solamente en el placer sino en la alegría de compartir puntos de vista y vivencias, además, sus conversaciones son más profundas.
Ese mensaje es crónicamente malentendido. Tal vez lo entenderíamos mejor si Jesús lo hubiera expresado de esta manera: Cuanto más sensible llegues a ser, tanto más dolor se filtrará en tu vida. Entonces, entendemos la relación.
La Iglesia Católica está viviendo durante las últimas semanas momentos muy convulsos ante los escándalos de abusos por parte del clero, la participación de algún importante miembro de la Iglesia y el encubrimiento de otros.
Recordemos que toda persona es imagen y semejanza de Dios, poseedora de una dignidad inmensa y que hay que respetar desde su concepción hasta su muerte natural.
Este librito que tienes en tus manos fue escrito hace más de 500 años; varias décadas antes de que se difundiera la imprenta. Por lo tanto, al principio se hicieron copias manuescritas, algunas de las cuales se encuentran en diversas bibliotecas.
El mismo Bauman describe un síndrome, el de la impaciencia, con el que da a entender que cualquier vínculo resulta ser una amenaza.
Las familias tienen algunos retos cuando es tiempo del regreso a clases, temporada en que es importante el pedir ayuda al maestro, compañeros, hermanos mayores y, por supuesto, a Dios a través de un intercesor, en este caso, san Juan Bosco.
En materia de sexualidad, muchas veces uno sabe qué no tiene que hacer, y, a pesar de saberlo, termina haciéndolo. No ocurre sólo con aquellas cosas sobre las que puede haber dudas, sino también con aquellas de las que uno está seguro. Si sé que está mal, ¿por qué lo sigo haciendo?
“Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Mc 16-15). Los primeros cristianos entendieron muy bien desde el principio ese carácter universal, católico, del mensaje de Cristo. Por eso, a lo largo de los siglos la Iglesia se ha ido expandiendo por todos los rincones del mundo.
Desde que se murió su mujer, hace ya 12 años, los días de Giorgio Angelozzi, un italiano de 79 años, eran largos y tristes. Pasaban semanas en las que no hablaba con nadie y sobre todo él, que había dedicado toda su vida a enseñar: rodeado de jóvenes, se sentía solo e inútil.
Recuerdo muy bien que alguna vez me dijeron que para que la Misa dominical “me contara” como precepto dominical, debía llegar antes de las lecturas, para así poder pasar a comulgar.
Que sucede cuando un católico deja la iglesia y se va a un grupo separado. Cuales son las causas, siendo que mostraba un amor por la iglesia y de pronto la deja, inmadurez y o falta de compromiso?
«Pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá». ¡Cuántos problemas y dudas de fe ha despertado esta afirmación! ¡Cuántas veces le pido a Dio algo con fe y no sucede lo que pido! Le pido un milagro, una curación, una ayuda. Pido su intercesión.
Sea en la Misa o en la piscina, todos estamos llamados a vestir modestamente, de manera apropiada a las circunstancias y de acuerdo a nuestro estado en la vida, puesto que lo que usamos retrata a los demás quiénes somos y qué estamos haciendo.
¿Y por qué unas personas son tan sociables, y ríen y bromean, y otras son malhumoradas, hurañas y tristes; y unas son irritables, violentas e iracundas, mientras que otras son indolentes, irresolutas y apocadas?
Escuchamos hablar mucho del estrés, del daño que causa en nuestra vida. Sabemos que bloquea la zona del cerebro que se encarga de la resolución de problemas; que produce una distorsión entre lo que sucede y la interpretación que hacemos de la realidad.
La prisión sólo tiene sentido cuando sirve para renovar al hombre, ofreciendo una posibilidad para reflexionar, cambiar de vida e integrarse en plenitud a la sociedad
La salvación es un don y una tarea. Sin la gracia de Dios nadie puede salvarse, pero sin el ejercicio de la propia libertad para el bien, tampoco. Aquí reside el drama de la existencia humana; saber vivir de acuerdo con una libertad amante y rechazar la libertad esclava del pecado.
Un poeta argentino, hace ya muchos años, expresaba su descubrimiento: lo sufrido, lo llorado, lo perdido, tienen sentido si nos condujeron a metas buenas, a reencuentros, a amores que no pasan.
En estos días en que nuestros hijos están de vacaciones es muy común que pasen muchas horas en las redes sociales y que tengan acceso a diversas páginas de internet.
Un laico escribió: «¿Qué sentido y qué valor tiene nuestro trabajo de laicos ante Dios? Es verdad que los laicos nos dedicamos también a muchas obras de bien; pero la mayor parte del tiempo y de las energías de nuestra vida tenemos que dedicarlas al trabajo.