El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, ha responsabilizado a los países islámicos de la escalada de la violencia en la Franja de Gaza, que está siendo constantemente bombardeada por Israel a raíz de los ataques del Movimiento de Resistencia Islámica, por su falta de unión frente al régimen sionista
El Observatorio Sirio para Derechos Humanos ha informado este martes de que milicias partidarias del partido-milicia chií libanés Hezbolá han lanzado misiles desde Siria hacia los Altos del Golán, ocupados por Israel, en medio de la escalada de la violencia en la Franja de Gaza.
El secretario de Estado, Antony Blinken, advirtió que Estados Unidos responderá “de manera decisiva” si Irán o sus agentes atacan a los estadounidenses la advertencia más severa hasta la fecha mientras la Administración Biden intenta evitar que Teherán se involucre en la guerra entre Israel y Hamás
"Porque Hamás cometiera un acto terrorista contra Israel, Israel no tiene que matar a millones de inocentes", ha dicho Lula, quien ha puesto en duda que la comunidad internacional quiera realmente acabar con el conflicto, señalando nuevamente a la actual estructura de Naciones Unidas.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, dijo el martes que los recientes ataques de su país han quebrado la seguridad de las bases y los corredores marítimos de la flota de Rusia en la parte occidental del Mar Negro, mientras las tropas de Kiev buscan expulsar a las fuerzas de Moscú.
Israel está intensificando su bombardeo de la Franja de Gaza previo a una esperada invasión por tierra del enclave. La cantidad de muertos en Gaza está aumentando rápidamente, y Estados Unidos teme que eso pueda provocar un conflicto más amplio en la región.
Israel intensificó sus bombardeos sobre objetivos en la Franja de Gaza, dijo el ejército el martes, antes de una esperada ofensiva terrestre contra insurgentes de Hamás que Estados Unidos teme que pueda desencadenar un conflicto más amplio en la región, incluyendo ataques a tropas estadounidenses.
El ministro de Exteriores de Irán, Hosein Amirabdolahian, ha conversado con el líder del brazo político de Hamás, Ismail Haniye, y el secretario general de Yihad Islámica, Ziad al Najala, para trasladar el apoyo a las milicias palestinas en el conflicto abierto con Israel.
La guerra abierta en Oriente Próximo a raíz de los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) contra Israel, que dejaron cerca de 1,400 muertos, corre el riesgo de expandirse ante los últimos enfrentamientos en la frontera con Líbano.
Un barco de la guardia costera china y una de sus embarcaciones milicianas rozaron el domingo a un barco guardacostas filipino y otro militar de suministro en incidentes separados cerca de un banco de arena disputado, una grave confrontación que podría aumentar el temor a un conflicto armado.
Aviones israelíes atacaron el lunes objetivos en varios lugares de Gaza, incluidas zonas donde se había dicho a los civiles palestinos que buscaran cobijo, después de que se permitiera la entrada de otro pequeño cargamento de ayuda en el asediado territorio gobernado por Hamás.
"La resistencia es fuerte del lado de Palestina. La estructura política y de seguridad del régimen israelí se ha derrumbado y solamente su maquinaria de guerra funciona contra los civiles", ha indicado el jefe de la diplomacia iraní en su perfil de la red social X, antes Twitter.
Durante días, Israel ha estado a punto de de lanzar una ofensiva terrestre en Gaza luego del brutal ataque de Hamás del 7 de octubre contra una serie de comunidades israelíes. Israel ha apostado soldados y tanques en la frontera con Gaza, a la espera de la orden para iniciar la invasión.
Los últimos contencimientos mundialmente son señal de que el mundo tal vez ha caído en un nuevo periodo de desconcierto. Los países —y los grupos políticos como Hamás— están dispuestos a asumir grandes riesgos, en lugar de temer que las consecuencias serían demasiado graves.
El director de una reconocida conferencia de tecnología renunció en medio de críticas por sus declaraciones que insinuaban que Israel estaba cometiendo crímenes de guerra. Directores empresariales juraron nunca contratar a miembros de grupos estudiantiles de una universidad que condenaron a Israel.
Decenas de miles de manifestantes propalestinos marcharon el sábado bajo un lluvioso Londres para exigir que Israel deje de bombardear Gaza, y se hicieron llamamientos similares en ciudades de todo el mundo cuando la guerra entre Israel y Hamas inicia su tercera semana.
Sólo se permitió la entrada de 20 camiones, una cantidad que los trabajadores de salud dijeron que era insuficiente para hacer frente a la crisis humanitaria sin precedentes que se vive en Gaza. Más de 200 camiones con aproximadamente 3,000 toneladas de ayuda llevan días estacionados.
En Berlín, cientos de manifestantes propalestinos se habían reunido a pesar de la prohibición de reuniones, atacaron e hirieron a policías y bomberos. También hubo concentraciones en otras ciudades europeas contra el accionar de Israel frente a la organización islamista palestina Hamás.
Guterres, ha pedido este sábado a los líderes internacionales reunidos en El Cairo que negocien un alto el fuego inmediato entre Hamás e Israel y pongan fin a la "maldita pesadilla" que está siendo este nuevo conflicto en una región que se encuentra, una vez más, "a un paso del precipicio".
El contralmirante Daniel Hagari, portavoz militar israelí, dijo que Israel seguía trabajando para devolver a los rehenes y encontrar a los desaparecidos, y que sus objetivos no han cambiado. “Continuamos la guerra contra Hamas y estamos listos para la siguiente fase de la guerra”, afirmó.
