Alrededor de 120 palestinos han muerto a causa de los bombardeos ejecutados durante la madrugada de este martes por el Ejército de Israel contra la Franja de Gaza, en medio de las hostilidades desatadas tras el ataque lanzado el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Numerosos extranjeros fueron asesinados, tomados como rehenes o desaparecidos tras el ataque de Hamás contra Israel lanzado el 7 de octubre por el movimiento islamista palestino. Más de 1,400 personas murieron en territorio israelí a manos de hombres de Hamás.
Israel dice que no ataca a civiles y que los combatientes de Hamás los están usando como cubierta para sus ataques. Los combatientes palestinos han lanzado más de 7,000 cohetes hacia Israel desde el inicio de la guerra, según Israel, y Hamás dijo que el martes disparó una nueva oleada.
Israel está intensificando su bombardeo de la Franja de Gaza previo a una esperada invasión por tierra del enclave. La cantidad de muertos en Gaza está aumentando rápidamente, y Estados Unidos teme que eso pueda provocar un conflicto más amplio en la región.
Israel intensificó sus bombardeos sobre objetivos en la Franja de Gaza, dijo el ejército el martes, antes de una esperada ofensiva terrestre contra insurgentes de Hamás que Estados Unidos teme que pueda desencadenar un conflicto más amplio en la región, incluyendo ataques a tropas estadounidenses.
Hagari ha subrayado además que entre los secuestrados hay una cifra "no insignificante" de extranjeros, al tiempo que ha especificado que el último balance no incluye a Judith Raanan y a su hija Natalie, de nacionalidad israelí-estadounidense y liberadas por Hamás durante la noche del viernes.
Así, ha responsabilizado al Consejo de Seguridad de la ONU de "las consecuencias de no detener la guerra", así como por la tardanza en abrir de manera "urgente" corredores humanitarios, del mismo modo que rechaza la "politización" que se está haciendo de la entrega de ayuda humanitaria.
Israel seguía bombardeando intensamente Gaza el lunes. Tras un ataque en Ciudad de Gaza, una mujer con la cara ensangrentada lloraba mientras estrechaba la mano de un familiar muerto. Al menos tres cadáveres estaban tendidos en la calle, uno de ellos en una corriente de agua gris
Aviones de combate israelíes atacan objetivos en toda Gaza antes de una esperada ofensiva terrestre por parte de Israel. La guerra, ahora en su día 17, es la más mortífera de cinco que han librado ambos bandos.
La guerra abierta en Oriente Próximo a raíz de los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) contra Israel, que dejaron cerca de 1,400 muertos, corre el riesgo de expandirse ante los últimos enfrentamientos en la frontera con Líbano.
Aviones israelíes atacaron el lunes objetivos en varios lugares de Gaza, incluidas zonas donde se había dicho a los civiles palestinos que buscaran cobijo, después de que se permitiera la entrada de otro pequeño cargamento de ayuda en el asediado territorio gobernado por Hamás.
Aviones israelíes atacaron el lunes objetivos en varios lugares de Gaza, incluidas zonas donde se había dicho a los civiles palestinos que buscaran cobijo, después de que se permitiera la entrada de otro pequeño cargamento de ayuda en el asediado territorio gobernado por Hamás.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha avisado este domingo que Líbano se convertirá en escenario de una guerra "devastadora" si el partido-milicia chií libanés Hezbolá decide intensificar sus ataques al Ejército israelí en la frontera hasta el punto de un enfrenamiento en firme.
Aviones israelíes de combate atacaron objetivos en diferentes lugares de Gaza durante la noche y el sábado por la mañana, así como dos aeropuertos en Siria y una mezquita en la ocupada Cisjordania supuestamente utilizada por milicianos.
En redes sociales han circulado conjeturas en los días desde la explosión que sugieren que el sistema de defensa de Israel conocido como el Domo de Hierro causó la desintegración del cohete y la explosión en la tierra, el cual está diseñado para interceptar cohetes en el cielo.
Las últimas grandes manifestaciones contra el presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, se produjeron en septiembre de 2019 cuando miles de personas salieron a las calles para pedir la "caída del régimen", retomando la emblemática consigna de la Primavera Árabe: "El pueblo quiere que caiga el régimen"
La semana pasada, el influyente clérigo ya logró que decenas de miles de sus fieles se congregaran en la plaza Tahrir de Bagdad, en la capital iraquí, para protestar por los ataques israelíes sobre la Franja de Gaza, que según Hamás ha dejado ya más de 4,100 muertos y 13,200 heridos.
Baqueri ha advertido sobre las "consecuencias" de esta situación y ha reclamado "adoptar acciones serias para evitar la continuación de los brutales ataques del régimen sionista contra civiles en Gaza y entregarles ayuda humanitaria, incluida comida y medicinas".
Este ataque se suma a otro ejecutado el jueves contra la iglesia ortodoxa griega de San Porfirio, la más antigua en la Franja, que se saldó con la muerte de al menos ocho personas. El edificio, que servía como refugio para cientos de desplazados, ha sufrido graves daños materiales.
Así las cosas, el representante de la diplomacia rusa en Israel ha advertido de que las cifras pueden aumentar en todos los aspectos --tanto los fallecidos, como los rehenes y los desaparecidos-- debido a que "ni siquiera la parte israelí tiene todos los datos".
