Ahora que el presidente Donald Trump se prepara para reunirse con el líder de Corea del Norte Kim Jong Un por segunda ocasión, intenta recrear el suspenso, la idea de que lo que está en juego es algo decisivo y el aura de su primera reunión.
Un silencio absoluto es el principal trascendido hoy acerca de la visita que realiza aquí Stephen Biegun, representante especial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El representante especial de Estados Unidos para la política sobre Corea del Norte, Stephen Biegun, ha llegado este miércoles a la capital del país asiático, Pyongyang, para participar en los preparativos de cara a la próxima cumbre entre Donald Trump y Kim Jong Un.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el martes que celebrará una cumbre de dos días con el líder de Corea del Norte el 27 y 28 de febrero en Vietnam para continuar sus esfuerzos para convencer a Kim Jong Un de que abandone las armas nucleares.
"Juntos podemos romper con décadas de bloqueo político. Podemos acabar con viejas divisiones, curar viejas heridas, construir nuevas coaliciones", afirmó el presidente. "Debemos rechazar la política de la venganza, la resistencia y la retribución y abrazar el potencial ilimitado de la cooperación".
El Gobierno de Corea del Norte ha expresado su respaldo al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y ha condenado "cualquier intento de destituir" al mandatario chavista.
El presidente Donald Trump quería hablar. En un inicio invitó a A. G. Sulzberger, el director de The New York Times, a una cena extraoficial. Sulzberger respondió a su vez con una solicitud para una entrevista oficial que incluía a dos reporteros del Times. La Casa Blanca aceptó.
El presidente Donald Trump calificó el miércoles a sus jefes de inteligencia de “ingenuos” y “pasivos”, después de que dijeron al Congreso que Corea del Norte difícilmente desmantelará su arsenal nuclear y que el acuerdo con Irán funciona.
Mientras Pekín y Moscú buscan expandir su alcance global, algunos aliados estadounidenses se están alejando de Washington como reacción a las cambiantes políticas de seguridad y comercio del gobierno, señaló el Director de Inteligencia Nacional Dan Coats.
Contradiciendo directamente al presidente Donald Trump, las agencias de inteligencia estadounidenses le dijeron el martes al Congreso que es poco probable que Corea del Norte deponga sus armas nucleares, que el grupo Estado Islámico sigue siendo una amenaza...
Pese al gesto conciliatorio, perduran fuertes diferencias entre los dos países. Una de las divergencias cruciales, dicen los expertos, es qué medidas específicas debe tomar Corea del Norte para avanzar hacia la desnuclearización y qué alicientes deberá ofrecer Trump para recompensar esas medidas.
El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, ordenó hacer preparativos para su segunda cumbre con el presidente estadounidense Donald Trump, afirmando que está “esperando con paciencia y buena voluntad” poder trabajar para resolver los problemas comunes, informó el jueves la prensa oficial norcoreana.
Representantes de Estados Unidos, Corea del Sur y Corea del Norte están reunidos en Suecia para hablar de problemas comunes, informaron fuentes del país europeo.
El anuncio es una inusual señal de avance en un esfuerzo de desnuclearización que se ha estancado desde la reunión histórica entre Trump y Kim en Singapur el año pasado.
Un enviado de Corea del Norte viajaba el jueves a Washington para reunirse con el secretario de Estado Mike Pompeo y quizás con el presidente Donald Trump, en busca de sentar las bases para una segunda cumbre entre los países, dijo una persona familiarizada con el tema.
Medios surcoreanos, la cadena de televisión CNN y la página especializada NK News afirmaron que una delegación de alto nivel de Corea del Norte llegará este jueves a Washington para entrevistarse con el secretario de Estado Mike Pompeo, en un nuevo intento por confirmar una segunda cumbre.
Un alto cargo norcoreano hizo escala en Beijing el jueves cuando, al parecer, se dirigía a Estados Unidos para conversaciones antes de una posible segunda cumbre entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong Un.
Estados Unidos y Corea del Norte planean sostener conversaciones de alto nivel en Washington tan pronto como esta semana para discutir una segunda cumbre de sus líderes, luego de un estancamiento en sus negociaciones nucleares, dijeron el martes medios surcoreanos.
Corea del Norte ha dejado de ser el “enemigo” de Corea del Sur, aunque su programa nuclear supone todavía una amenaza de seguridad, según el informe bienal de defensa de Seúl publicado el martes.
El máximo líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, ha admitido en una conversación con su homólogo chino, Xi Jinping, que la negociación con Estados Unidos se encuentra paralizada y le expresó su "preocupación" por esta circunstancia.
