MENSAJERÍA
Pero ¿dónde están los otros?
La mayoría de nosotros hemos sido educados para creer que tenemos el derecho a poseer todo lo que nos viene honradamente, tanto por nuestro propio trabajo como por legítima herencia.
La mayoría de nosotros hemos sido educados para creer que tenemos el derecho a poseer todo lo que nos viene honradamente, tanto por nuestro propio trabajo como por legítima herencia.
VII Papa. En Roma, san Sixto I, papa, que en tiempo del emperador Adriano rigió la Iglesia Romana, siendo el sexto tras el bienaventurado Pedro (128).
La verdadera alegría de la vida, naturalmente hablando, es la admiración por lo maravilloso. Lo maravilloso es eso que es especialmente bello, eso que como que se escapa ‘hacia arriba' de esta realidad terrenal, para tocar en el cielo empíreo, en esa realidad que está más cerca de Dios
Un gobierno decide invadir el territorio de un país vecino. Desea más poder, más riquezas, más esclavos, más fama.
Martirologio Romano: San Francisco de Paula, ermitaño, fundador de la Orden de los Mínimos en Calabria, prescribiendo a sus discípulos que viviesen de limosnas, no teniendo propiedad ni manipulando dinero, y que utilizasen sólo alimentos cuaresmales.
Jesucristo califica con mucha dureza a la gente de su tiempo y dice que son una generación perversa. Perversa porque tienen una señal y no están dispuestos a aceptar la señal que Dios les da. La señal que Cristo dará, será su Resurrección.
Muchas veces, cuando no entendemos alguna cosa, un poco en plan de broma decimos que “es más oscuro que el misterio de la Santísima Trinidad”. Y, sin embargo, nada es más cercano a nuestra vida cristiana que este maravilloso dogma.
La codicia se considera un pecado capital, y como tal, en cualquier sociedad y época, ha sido demostrada como un vicio. En efecto, al tratarse de un deseo que sobrepasa los límites de lo ordinario o lícito, se califica con este sustantivo actitudes peyorativas en lo referente a las riquezas.
Diácono y Mártir. En el lugar de Argol, en Persia, san Benjamín, diácono, que al predicar insistentemente la palabra de Dios, consumó su martirio con cañas agudas entre sus uñas, en tiempo del rey Vararane V († c. 420).
Leonardo Murialdo no es un hombre lejano: nace en Turín el 26 de octubre de 1828 y muere en la misma ciudad el 30 de marzo de 1900. Es una persona dulce y noble, un hermano que se entrega todo a otros hermanos que no tienen casa y familia, que están solos y sin cariño, que no conocen a Dios.
El romanticismo mata al amor. Las películas románticas nos presentan al amor como una especie de llave mágica que abre las puertas de todos los corazones humanos y resuelve todos los problemas.
Las virtudes teologales fundan, animan y caracterizan el obrar moral del cristiano. Le dan vida a todas las virtudes morales. Son infundidas por Dios en el alma de los fieles para que por medio de ellas, el hombre sea capaz de actuar como hijo suyo y de ese modo alcanzar la salvación.
En aquella tarde, Jesús amó a los suyos como nadie los había amado hasta entonces, los amó, hasta el límite, hasta el fin, hasta el extremo, hasta dar la vida. Jesús demostró este amor al otro en el servicio y en el estar atento en las cosas pequeñas.
Reina de Gales. En Stow, en Gales del Sur, Santa Gladys, quien al enviudar, dedicó sus riquezas a atender las necesidades de los marginados, para luego retirarse y hacer vida contemplativa y de penitencia en la soledad de una ermita en dicho territorio.
Porque lo grande suscita un mayor respeto y sentido de responsabilidad, mientras lo pequeño es visto como poco importante y sin relevancia.
Dios nos prueba como el oro en el crisol, hay que fundirse para brillar, ¿realmente es necesario pasar por la vida con tantas pruebas, por tantos desencantos?, ¿la vida no sería más bella y más amable sin tantos contratiempos?
En Salzburgo, en Baviera, san Ruperto, obispo, que siendo originario de la región de Worms, a petición del duque Teodon se dirigió a Baviera y en la antigua ciudad de Juvavum edificó una iglesia y un monasterio, donde estuvo al frente como obispo y como abad, y desde allí difundió la fe cristiana.
Con frecuencia hablamos de los distintos puntos de vista que entran en juego a la hora de llamar a una acción buena o mala, verdadera o falsa, lograda o fallada. Nos preguntamos por lo que en realidad deseamos, intentando comprender el bien como la realización de ese deseo.
Es común encontrarnos con una constante que va despuntando cada vez más: “El terror a envejecer”. Al menos así lo vemos reflejado en muchas personas -cada vez más- , hombres y mujeres, que entran en depresión en una edad joven adulta –cronológicamente hablando- por el miedo, el pavor, a envejecer.
Rey de Borgoña y Orleáns. En Chálon-sur-Saóne, en Burgundia, en Francia, sepultura de san Guntrano, rey de los francos, que distribuyó sus tesoros entre las iglesias y los pobres (593).