El NUG, formado en parte por exdiputados de la Liga Nacional para la Democracia -el partido de la encarcelada Aung San Suu Kyi, cuya victoria en las elecciones de 2020 fue tachada por fraudulenta por los generales, su excusa para dar el golpe-, calificó el ataque en Kachin como "despiadado".
Los dirigentes israelíes tendrán que decidir ahora si limitan sus represalias para salvaguardar a los rehenes. El portavoz de Hamás, Abu Ubaida, lanzó el lunes la amenaza de matar a un cautivo israelí por cada bombardeo israelí de una casa civil sin previo aviso, y de retransmitir el asesinato.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el martes que al menos 14 ciudadanos estadounidenses murieron en el ataque de Hamas y que hay estadounidenses entre los rehenes en Gaza. Biden, que habló el martes temprano con el primer ministro Benjamin Netanyahu.
Aviones de combate israelíes bombardearon barrio por barrio la Franja de Gaza el martes, reduciendo edificios a escombros, mientras Israel prometía una represalia por el ataque sorpresa de Hamas del fin de semana que “reverberará durante generaciones”.
Más de 180,000 personas abarrotan los refugios de Naciones Unidas en la Franja de Gaza mientras la aviación israelí castiga el diminuto territorio de 2,3 millones de habitantes en respuesta a un ataque sin precedentes de Hamas, el grupo armado que gobierna la región.
En el cuarto día de la guerra en curso entre israelíes y palestinos, muchos países abordan la desaparición de sus ciudadanos mientras se superan los 1,600 fallecidos en un conflicto que se espera que se agrave.
En este sentido, instó a la oposición a unirse al Gobierno de coalición “sin condiciones previas”, como se hizo en la víspera de la Guerra de los Seis Días de 1967, cuando Israel capturó la Península del Sinaí en Egipto y Los Altos del Golán en Siria, según difundió el diario ‘The Times of Israel’.
Los mandos de Hamas aseguran que cientos de sus 40,000 combatientes participaron en el ataque. Israel afirma que el grupo cuenta con alrededor de 30,000 elementos y con un arsenal de drones y cohetes, incluidos algunos con un alcance de hasta 250 kilómetros (155 millas).
“No podemos confirmar lo que han dicho familiares de estas personas de que ellos habían fallecido hasta tanto no tengamos la información oficial del gobierno de Israel porque nos indicaron que la única autoridad que puede emitir dicha información es la Policía”, dijo a medios locales.
El líder israelí ha denunciado los "salvajes ataques de Hamás" contra "israelíes inocentes". "Asensinan a familias en sus casas, masacran a cientos de jóvenes en un festival al aire libre, secuestran a decenas de mujeres, niños y ancianos, incluso a supervivientes del Holocausto", ha revelado.
El presidente de la república rusa de Chechenia, Ramzan Kadirov, ha mostrado su disposición a enviar tropas a la Franja de Gaza como fuerzas "de mantenimiento de paz" y para evitar que el conflicto entre el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) e Israel escale "hacia algo más".
Por su parte, Abul Gheit ha resaltado que el organismo rechaza la violencia y ha apelado a un alto el fuego entre el Ejército de Israel y Hamás, al tiempo que ha alertado de que podría haber una escalada del conflicto "por la ausencia de perspectivas políticas" para solucionar el problema palestino
Por otra parte, la OCHA ha señalado que "las autoridades israelíes han seguido imponiendo múltiples restricciones de movimiento, incluido el cierre de puestos de control y entradas a localidades y ciudades en Cisjordani", incluido el campamento de refugiados de Shufat, en Jerusalén Este.
Alrededor de 900 personas, incluidos 73 soldados, han muerto en Israel, según la prensa. En Gaza, han fallecido más de 680 personas, de acuerdo con las autoridades. Entre estas, hay cientos de combatientes de Hamas, según Israel. Miles de personas han resultado heridas en ambos bandos.
Para los palestinos en Gaza, la mirada de Israel nunca está muy lejos. Drones de vigilancia sobrevuelan constantemente la zona. La fortificada frontera está llena de cámaras de seguridad y soldados de guardia.
El ejército prometió el lunes plantar un asedio total a la Franja de Gaza, mientras sus militares buscaban milicianos en el sur, vigilaban brechas en la cerca fronteriza y bombardeaban el territorio gobernado por Hamas tras una incursión sin precedentes el fin de semana.
Las autoridades de Israel han confirmado hasta ahora más de 700 muertos y 2,000 heridos a causa de los ataques de Hamás, apoyados por Yihad Islámica, que continúan activos en varios puntos del sur de Israel, incluidas informaciones sobre una nueva incursión en la ciudad de Sderot (sur).
Israel intensificó el lunes los bombardeos sobre la Franja de Gaza, tras declarar la guerra y prometer que destruiría “la capacidad militar y de gobierno” de Hamas, que controla el enclave. Soldados israelíes luchaban para expulsar a hombres armados gazatíes de varias zonas en el sur de Israel.
Israel declaró formalmente la guerra y dio luz verde a “medidas militares significativas” en respuesta al ataque sorpresa de Hamas. Las fuerzas armadas tratan de eliminar a los combatientes que continuan en los poblados del sur del país e intensifican sus bombardeos sobre la Franja de Gaza.
Soldados israelíes combaten contra integrantes de Hamas, el grupo insurgente que gobierna Gaza, en las calles del sur de Israel y lanzando ataques aéreos sobre Gaza, un día después de un mortífero y sorpresivo ataque sin precedentes por parte de combatientes de Hamas.
