El presidente de Brasil Jair Bolsonaro canceló un viaje a Nueva York después de que varias compañías se retiraron de un evento en el que el mandatario recibiría un homenaje.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió a advertir el viernes del peligro de que la expresidenta argentina Cristina Kirchner gane las elecciones de octubre.
El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao, dijo el jueves que, en retrospectiva, el intento del líder opositor venezolano, Juan Guaidó, para derrocar al presidente Nicolás Maduro no fue la mejor decisión.
El Gobierno brasileño mantiene su firme respaldo a Juan Guaidó, pero cree que se precipitó en su intentona de derribar a Nicolás Maduro.
Amnistía Internacional condena la represión ocurrida en Venezuela durante las protestas antigubernamentales que se registraron en los últimos días, e insta al gobierno de Nicolás Maduro, a través de su directora para las Américas Erika Guevara Rosas, a “poner fin a su política de represión”.
A pesar de que Guaidó ha exhortado al ejército venezolano a unírsele desde que se declaró presidente encargado en enero, su llamado junto a hombres uniformados representa un nuevo paso. Sigue siendo poco claro cuánto apoyo tiene de los militares.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, expresó el martes la “solidaridad” de su nación con el pueblo de Venezuela, en momentos en que el líder de la oposición de ese país realizaba un nuevo esfuerzo para forzar la salida del mandatario Nicolás Maduro.
Cuando un ministro del Supremo Tribunal Federal de Brasil bloqueó la publicación de un artículo sobre la corrupción que mencionaba el nombre de un compañero ministro, la repercusión en las redes sociales fue rápida. Tres días después, el ministro se arrepintió y canceló su propia decisión.
Lula cumple una condena por blanqueo de capitales y corrupción en una operación de compra de una vivienda de tres pisos en la playa de Guarujá (São Paulo). El inmueble fue reformado por una constructora que tenía contratos con Petrobras, donde fue destapada una trama de corrupción.
El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva entra en un pequeño auditorio de la sede de la Policía Federal en Curitiba, donde está preso desde abril del año pasado. Allí le esperan los periodistas de EL PAÍS y del periódico Folha de S. Paulo.
Mientras en el Congreso se desarrolla el debate por una reforma de las jubilaciones considerada vital para el futuro de la economía más grande de Sudamérica, el presidente ultraderechista se mostró una vez más enfocado en la agenda social conservadora.
Miles de indígenas brasileños acudieron a una marcha el viernes en la capital del país para protestar contra cambios ministeriales implementados por el presidente derechista Jair Bolsonaro, que dicen perjudican a sus pueblos.
Desde la superintendencia de la policía federal en Curitiba, donde cumple una condena a ocho años y 10 meses de prisión por corrupción y lavado de dinero, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva aseguró que Brasil está siendo gobernado por una “banda de locos”.
Más de 1,000 indígenas brasileños se congregaron el miércoles afuera del Congreso para una protesta anual de tres días conocida como el Campamento Tierra Libre para manifestarse contra lo que ellos ven como retrocesos en sus derechos en la administración del presidente Jair Bolsonaro.
El número de brasileños que rechaza el Gobierno del presidente Jair Bolsonaro siguió creciendo este mes, según un sondeo de opinión publicado el miércoles, lo que resalta las dificultades de la administración tras su victoria de octubre en los comicios.
Luego de tener su pena reducida por la Justicia el ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, preso desde hace un año, no cuenta con recursos para pagar la fianza que le permitiría recuperar parcialmente la libertad dentro de unos seis meses.
En una sesión celebrada esta tarde, los cuatro jueces convocados han votado a favor de que la pena de 12 años y un mes de prisión por corrupción y lavado de dinero sea sustituida por otra de ocho años y 10 meses.
Preso de las contradicciones ideológicas y los conflictos políticos en el Congreso, el gobierno del presidente brasileño Jair Bolsonaro se ha visto obligado a postergar la implementación de una agenda económica liberal y demora la aprobación de reformas prometidas durante la campaña electoral.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, provocó una serie de reprimendas veladas por parte de Israel el sábado, tras asegurar que el genocidio de judíos por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial podría ser perdonado.
El secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo dijo el viernes desde Chile que el financiamiento chino al gobierno de Nicolás Maduro empeora la crisis que azota a Venezuela y criticó los lazos de Rusia con los líderes autoritarios de ese país, Nicaragua y Cuba.
