VUELTA AL MUNDO
La hora más oscura de Europa
Europa cerró 2018 convertida en plató para una distopía. El emperador Macron, solo ante un Arco de Triunfo profanado por grafitis y una Marianne tuerta y desfigurada por la 'revolución amarilla'.
Europa cerró 2018 convertida en plató para una distopía. El emperador Macron, solo ante un Arco de Triunfo profanado por grafitis y una Marianne tuerta y desfigurada por la 'revolución amarilla'.
Después de dos meses de movilizaciones en toda Francia y nueve sábados consecutivos de manifestaciones en París y otras ciudades, los chalecos amarillos siguen condicionando la agenda francesa y, en parte, europea.
En Westminster, mientras, se está cociendo la secuela: una nueva guerra "incivil" entre las dos campañas, que han vuelto a calentar motores ante la posibilidad cada vez más real de un segundo referéndum.
La presión del presidente Donald Trump para construir un muro en la frontera habla de un problema que los dirigentes populistas están enfrentando en el mundo occidental.
La insistencia de la izquierda en distinguir entre autoritarismos inaceptables y los que merecen infinita comprensión -esto es: los que llegaron al poder enarbolando sus ideas- merma su legitimidad para presentarse como la primera línea de defensa frente al auge de la ultraderecha.
David Cameron se autoengañó e indujo a engaño a los socios europeos cuando alcanzó un acuerdo con Bruselas para un estatus especialísimo del Reino Unido en la UE. Creyó que el pacto bastaría para evitar el Brexit y lo sometió a referéndum, pero fue incapaz de mantener el orden en su partido.
El fascismo puede definirse de muchas maneras, todas ellas parciales. Según la época y el lugar, ha consistido en el secuestro del Estado por parte de intereses privados, o en el encuadramiento de la sociedad dentro de un esquema cuartelario.
En Brazillonaires Alex Cuadros, excorresponsal de Bloomberg en Brasilia, anota que en 2006, la última vez que hizo públicas sus cuentas, la IURD registró donaciones privadas por valor de 750 millones de dólares.
Eso es lo que representa el capitán retirado del Ejército y político ultraderechista brasileño Jair Bolsonaro: el cambio en un país harto de la violencia y la corrupción, dos temas que en México también definieron la elección del izquierdista Andrés Manuel López Obrador como presidente.
Esta semana está llena de acontecimientos que marcarán las relaciones entre Rusia y América Latina durante muchos años. Uno de ellos es el foro empresarial que ha tenido lugar este 29 de octubre en La Habana.
Son unas elecciones regionales, pero amenazan con sacudir los ya inestables cimientos de la gran coalición que gobierna en Berlín.
No hace mucho estaba en Internet echando un vistazo al informe de 2018 Libertad en el mundo publicado por Freedom House y caí en la cuenta de algo muy grave. En el mundo árabe solo hay un país que haya sido clasificado como "libre".
Durante una conferencia de prensa en las Naciones Unidas en septiembre de este año en Nueva York, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que si el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, estuviera ahí, estaría dispuesto a reunirse con él.
Esta semana, la policía federal del Brasil pidió que se investigue a Michel Temer por corrupción y lavado de dinero. Ya en dos oportunidades la Fiscalía General de ese país ha intentado investigar al actual presidente, pero hasta ahora Temer ha logrado bloquear esa iniciativa en el congreso.
Desde que asumió la presidencia el 7 de agosto, Iván Duque se enfrenta a las promesas de su campaña electoral. Una de ellas consistía en prohibir la dosis personal de droga, ya despenalizada en Colombia en 1994 por la Corte Constitucional.
La historia de los cuadernos de la corrupción Kirchner es de novela, pero algunos aspectos de la misma son especialmente fantásticos. Es una alquimia en la cual los políticos tienen más imaginación que los escritores y los cineastas.
Los políticos se resisten a hacer reformas que afecten a sus ingresos, estatus o influencia. Por eso, aunque el Congreso es el escenario central para expedir las leyes, las constituciones establecen mecanismos de participación ciudadana para cambios que cuenten con el apoyo masivo de la población.
El destino de Colombia y Venezuela siempre ha estado entrelazado. Pero hoy el sentimiento mutuo de repúblicas hermanas, con el que históricamente se han reconocido ambas naciones, ha cobrado un nuevo giro.
"Los rusos no son nuestros amigos, son nuestros hermanos: a los amigos los puedes elegir". Era un chiste que se contaba en Praga en los años 60. La República Checa recuerda estos días la última vez que Moscú ejerció de severo hermano mayor.
La crisis política y el mayor despotismo estatal en Nicaragua solo hacen más evidente la fractura de la izquierda latinoamericana en dos bandos distintos: la izquierda democrática -que condena la violencia del gobierno de Nicaragua- y la autocrática -que lo respalda y apoya a Maduro-.