El Departamento de Agricultura de Estados elevó el viernes sorpresivamente sus previsiones para la oferta local de maíz, por un recorte de lo que estima que usarán los exportadores y los productores de etanol.
En el polo agroexportador de Rosario, sobre el río Paraná en Argentina, las plantas de molienda de soja están sintiendo el impacto de una guerra comercial entre Estados Unidos y China. Algunas de las enormes instalaciones a lo largo del río quedaron inactivas y otras despidieron trabajadores.
Empresas estatales chinas compraron el jueves al menos 500,000 toneladas de soja estadounidense, las primeras adquisiciones desde que hace un mes un funcionario de Washington anunció que Pekín se había comprometido con 10 millones de toneladas.
Arnulfo Melo hunde sus manos curtidas por el sol en un cubo repleto de semillas de maíz rojo y las deja caer entre sus dedos, observándolas como quien mira un álbum familiar, un árbol genealógico. Provienen de aquellas que sembraron sus padres, abuelos y bisabuelos.
Los futuros de la soja subieron a un máximo de dos semanas y media el lunes en la Bolsa de Chicago, impulsados por las expectativas de un acuerdo entre Washington y Pekín y luego de que China prometió la semana pasada que realizaría compras adicionales de la oleaginosa estadounidense.
Las importaciones chinas de soja estadounidense durante enero casi doblaron el volumen del mes previo, por mayores reservas anticipadas de embarques luego de que Pekín y Washington acordaron una tregua en su disputa comercial, según datos de las autoridades aduaneras chinas.
l Consejo Internacional de Cereales (CIC) elevó el jueves sus proyecciones para la producción mundial de maíz en el ciclo 2018/2019, en base a una revisión al alza para los cultivos en China.
Los futuros del trigo en la Bolsa de Chicago se desplomaron nuevamente el miércoles, debido a la inquietud de los operadores ante las débiles exportaciones del cereal estadounidense a pesar de que su precio es competitivo en el mercado global.
La consultora agrícola brasileña Safras & Mercado informó una pequeña reducción en sus proyecciones para la cosecha de soja del país en la temporada 2018/2019, a 115,402 millones de toneladas, según un comunicado difundido el viernes.
Agroconsult redujo su proyección de la cosecha de soja de Brasil 2018/19 a 116,5 millones de toneladas en una estimación divulgada a clientes a inicios de mes, y está revisando las perspectivas tras un período de sequía y altas temperaturas que afectó a los cultivos en diciembre y enero.
Brasil producirá 115,34 millones de toneladas de soja en la cosecha 2018/19 que está siendo actualmente recolectada, una reducción de 3 pct respecto a una estimación anterior, dijo el martes la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), que también estimó menores envío de la oleaginosa.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) informó que China adquirió 2,603 millones de toneladas de semillas de soja, la segunda venta confirmada desde que el mayor comprador mundial de la oleaginosa anunció la semana pasada que importaría 5 millones de toneladas.
Algunos agricultores brasileños de soja en el estado de Goiás dijeron a Reuters que han decidido detener las ventas de la actual cosecha, apostando por una mejora de los precios debido a las pérdidas de producción observadas en algunas partes del país.
Agrónomos que participan en un recorrido por los cultivos de las principales regiones productoras de granos en Brasil esperan que sus pronósticos para la producción de soja esta temporada disminuyan aún más como resultado del mal clima en estados como Mato Grosso do Sul y Paraná.
Los futuros de la soja en Estados Unidos subieron el viernes a un máximo de dos semanas por preocupaciones sobre la cosecha en Brasil y coberturas de posiciones cortas antes de las previstas negociaciones comerciales entre Washington y Pekín la próxima semana, dijeron operadores.
Las importaciones chinas de soja desde Estados Unidos cayeron un 99 por ciento en diciembre a solo 69.298 toneladas, mostraron datos de aduana, lo que dejó a las importaciones de 2018 en su nivel más bajo desde 2008 en medio de la guerra comercial en curso.
Los futuros del trigo y el maíz cerraron con pérdidas el jueves en la Bolsa de Chicago, presionados por una toma de ganancias, mientras que la soja subió impulsada por las preocupaciones sobre el tamaño de la cosecha en Brasil.
Las lluvias registradas en los últimos días en Argentina dejaron condiciones de humedad favorables para el desarrollo de la soja 2018/19, aunque más agua en las próximas semanas podría generar excesos que dificulten el crecimiento de las plantas.
Productores brasileños de soja en Paraná y Mato Grosso do Sul, dos de los cinco mayores estados sojeros del país, están sufriendo pérdidas relacionadas con la sequía, dijeron analistas, una situación que podría llevar a una revisión de los pronósticos de cosecha del país.
Las precipitaciones en la segunda mitad de diciembre traerán alivio a los campos de soja afectados por la sequía en el estado brasileño de Paraná, el segundo mayor productor del país, según datos del Panel de Control Agrícola del Clima de Refinitiv.
