Salud
España pedirá prueba o vacuna COVID-19 a viajeros de China
España requerirá que todos los pasajeros aéreos que lleguen de China tengan pruebas negativas de COVID-19 o comprobante de vacunación, dijo el gobierno el viernes.
España requerirá que todos los pasajeros aéreos que lleguen de China tengan pruebas negativas de COVID-19 o comprobante de vacunación, dijo el gobierno el viernes.
Según sus cálculos esta oleada se extenderá hasta mediados de enero de 2023, mientras que la segunda durará desde finales de enero hasta mediados de febrero y estará provocada por el aumento del turismo debido a la celebración del Año Nuevo Lunar, que comienza el 22 de enero.
"En los últimos tres años hemos respondido efectivamente a cinco olas mundiales de infecciones, ganando tiempo precioso para el desarrollo de vacunas y medicinas", respondió el jueves el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Wang Wenbin.
La Unión Europea está evaluando la decisión de China de retirar sus controles más estrictos contra el coronavirus, pero se abstuvo el jueves de seguir inmediatamente a Italia —miembro de la UE— para exigir pruebas para los pasajeros de aerolíneas que vienen del país asiático.
Las medidas adoptadas por Estados Unidos, Japón y otras naciones para requerir pruebas de coronavirus a los pasajeros procedentes de China reflejan la preocupación a nivel internacional en torno a la posibilidad de que surjan nuevas variantes en el brote explosivo que se está produciendo...
El levantamiento de las restricciones, tras las protestas generalizadas contra ellas, significa que el COVID se está extendiendo en gran medida sin control y es probable que infecte a millones de personas al día, según algunos expertos internacionales en salud.
Estados Unidos, que ya sopesaba limitar la entrada de viajeros provenientes de ese país, confirmó el miércoles que a partir del 5 de enero requerirá pruebas negativas de covid-19 a todos los viajeros aéreos provenientes de China, Hong Kong y Macao, indicó un responsable gubernamental de salud.
Por su parte India y Japón exigirían una prueba COVID negativa a los viajeros procedentes de China continental, y los que dieran positivo en Japón tendrían que pasar una semana en cuarentena. Tokio también planea limitar el aumento de vuelos a China por parte de las compañías aéreas.
Compañías extranjeras aplaudieron la decisión de China de levantar las cuarentenas por coronavirus para quienes ingresen al país del exterior, calificándola como un paso importante para reanimar la economía, mientras Japón se sumó a la India el martes en anunciar restricciones...
El virus se está extendiendo sin control por todo el país, de 1,400 millones de habitantes, y los expertos en salud y los residentes dudan cada vez más de las estadísticas de Pekín, según las cuales no se han registrado nuevas muertes por COVID en los seis días transcurridos hasta el domingo.
"A partir de ahora, el Centro para Control y Prevención de Enfermedades de China no divulgará información sobre la pandemia de forma diaria", indicó la Comisión Nacional de Sanidad en un breve comunicado en el que no detalla las razones por las que ha tomado esta decisión.
Las salas de urgencias de pequeñas ciudades y pueblos al suroeste de Beijing están saturadas. Las unidades de cuidados intensivos rechazan ambulancias, los familiares de los enfermos buscan camas disponibles y los pacientes se desploman en los pasillos de los hospitales y son acostados en el suelo.
El director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, informó el miércoles que la agencia está “muy preocupada” ante los crecientes de reportes de casos graves de coronavirus en toda China después de que el país dejó de lado en buena medida su política “cero COVID”...
Las autoridades chinas de salud anunciaron el lunes dos nuevas muertes por COVID-19, ambas en la capital, Beijing. Eran las primeras muertes reportadas en semanas, dentro de un brote esperado de contagios tras el levantamiento de las estrictas medidas del país contra el virus.
La cifra oficial de fallecidos a causa del virus en el país sigue siendo baja, con apenas 5.235 muertes, frente a los 1,1 millones de Estados Unidos. Pero los expertos en salud pública advierten que no se puede realizar una comparación directa entre ambas estadísticas.
Hace tres años, el primer caso de covid-19 fue identificado en China, punto de arranque de una enfermedad que trastornó al mundo entero, y que ahora debe servir de lección para la próxima pandemia, según los expertos.
El gobierno de Biden volverá a ofrecer pruebas de COVID-19 gratuitas para todos los hogares estadounidenses, dentro de sus planes de contingencia para un posible aumento en los casos de coronavirus este invierno.
"Entonces, el desafío que aún tienen China y otros países es: ¿son las personas que necesitan ser vacunadas, vacunadas adecuadamente, con las vacunas correctas y la cantidad correcta de dosis y cuándo fue la última vez que esas personas recibieron las vacunas", dijo Ryan.
La verdadera magnitud de las infecciones de coronavirus en China es actualmente "imposible" de rastrear, reconocieron el miércoles las autoridades sanitarias del país, que advirtieron de una rápida propagación tras el abandono de la política "covid cero".
Las hospitalizaciones relacionadas con el coronavirus están volviendo a subir en Estados Unidos, donde las personas de edad avanzada representan una proporción cada vez mayor de las muertes y menos de la mitad de los residentes de casas para ancianos están al día en la vacunación contra el COVID.