La pandemia que ha trastornado la vida de Estados Unidos este año y ha provocado la muerte a más de 227,000 personas, está volviendo a surgir en los días previos a la contienda del 3 de noviembre, cuando el republicano Trump se enfrente al aspirante demócrata Joe Biden.
A sus 56 años, esta hija de inmigrantes de Jamaica e India ya sabe lo que es romper barreras. En 2018 se convirtió en la primera mujer del sur de Asia y en la segunda negra en llegar al Senado, tras haber sido entre 2011 y 2017 la primera mujer en ser fiscal general del estado de California.
Frente a docenas de simpatizantes con tapabocas de "Biden-Harris", los dos candidatos demócratas al Senado, Jon Ossoff y el pastor Raphael Warnock, se transforman en estrellas sobre un pequeño escenario instalado en un parque en el noreste de Atlanta.
Tres días antes de las elecciones del 3 de noviembre, Obama se sumará a Biden para hablar de su planteo de "unir a los estadounidenses para enfrentar las crisis que atraviesa el país y ganar la batalla por el alma de la nación", anunció este miércoles el equipo demócrata en un comunicado.
"Venimos de allá porque queremos hacer que este estado sea azul", dice a la AFP esta hondureña de 54 años, cuyo futuro depende de esta elección: está amparada por un estatus de protección temporal (TPS) que Trump eliminó y que, de reelegirse, la pondría en riesgo de deportación.
Las tensiones han ido en aumento en esta ciudad, escenario de una de las batallas más sangrientas de la guerra civil de 1861/65. Hace poco hubo fuertes enfrentamientos entre partidarios de Trump y manifestantes liberales. Kauffman dice que vio a algunos trumpistas que portaban armas.
A medida que la campaña presidencial en Estados Unidos cobraba impulso, esta madre de dos niños, de 57 años, y otros como ella salieron a las calles urbanas y suburbanas en todo el país para reclamar el fin del tráfico infantil.
El evento de Ivanka Trump este martes en el centro de Miami para apoyar a su padre era una fiesta antes de empezar. Los rugidos de las Harley Davidson y de los Ferrari decorados con el rostro de Donald Trump, la salsa a todo volumen y las mascarillas en la muñeca sirvieron de aviso a los...
Faltan solo seis días para el fin del ciclo electoral estadounidense que culmina con las votaciones del 3 de noviembre. Con la pandemia desbocada en el país, la batalla por la presidencia en Estados Unidos parece destinada a romper récords, y no siempre positivos: es el proceso electoral en el...
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, planea realizar el miércoles de un evento de campaña en el estado de Wisconsin, donde una cifra récord de casos de coronavirus ha llevado al gobernador a instar a la gente a permanecer en sus hogares.
Joe Biden aseguró el martes que, si gana las elecciones presidenciales la próxima semana, llamará inmediatamente al doctor Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del país.
El enorme caudal de papeletas por correo (ya se han emitido más de 45 millones) podría demorar días o semanas en contabilizarse, según los expertos, lo que significa que podría no declararse un ganador la noche del 3 de noviembre, cuando cierran las urnas.
El primer ministro Benjamin Netanyahu lo ha descrito como el “mejor amigo” que Israel ha tenido en la Casa Blanca. La mayoría de las personas en el convoy del martes parecían ser inmigrantes estadounidenses, aunque también había algunos activistas del partido Likud de Netanyahu.
A sólo una semana de las elecciones del 3 de noviembre, el presidente Donald Trump y su rival demócrata Joe Biden recorrerán el país el martes en un intenso día de campaña en el que también participará el expresidente Barack Obama.
Más de 1,000 líderes religiosos en Estados Unidos firmaron una carta abierta pidiendo “elecciones libres y justas” y llamando a los candidatos a respetar los resultados, independientemente de quién gane los comicios del 3 de noviembre.
El candidato presidencial demócrata Joe Biden aventaja al presidente Donald Trump por un sólido margen en Wisconsin y mantiene una distancia más estrecha en Pensilvania a poco más de una semana de las elecciones en Estados Unidos, según encuestas de opinión de Reuters/Ipsos divulgadas el lunes.
Biden hizo una aparición a menor escala en la ciudad de Chester, cerca de Filadelfia, donde se reunió con una docena de voluntarios de campaña y habló con periodistas. Biden dijo que “con la gracia de Dios” ganaría Pensilvania, el estado donde nació.
Tras la fuga del dirigente opositor Maduro removió del Ministerio de Relaciones Interiores al mayor general Néstor Reverol y nombró en el cargo a la gobernadora del estado central de Lara, Carmen Meléndez. Reverol fue nombrado ministro de Energía Eléctrica.
En este sentido, ha anunciado que dará "tres grandes mítines" a lo largo del día y ha confirmado que se encuentra de camino al estado de Pensilvania. "Tengo mucho que decir sobre los medios deshonestos y el soporífero Joe. Está teniendo lugar un tremendo encubrimiento en nuestro país", ha dicho.
Los expertos creen que Biden tiene bastantes opciones de imponerse en este estado, más después de que hace unas semanas el FBI evitara un plan para secuestrar a la gobernadora, la demócrata Gretchen Witmer, por parte de miembros de un grupo de extrema-derecha.
