VOX DEI
«¡Yo te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra!»
«¡Yo te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y a los entendidos, y las has revelado a la gente sencilla! ¡Gracias, Padre, porque así te ha parecido bien! ».