Mohammad Barkindo se refirió a las noticias de que el principal productor del cártel, Arabia Saudita, está trabajando en un pacto de largo plazo con Rusia que podría extender los controles sobre los suministros mundiales de crudo por parte de los mayores exportadores por hasta 20 años.
De hecho, de acuerdo al informe, la producción conjunta de los países de la organización bajó en febrero hasta 32,18 mbd, 77,100 bd menos que en enero, debido sobre todo a la caída del bombeo de Venezuela (-52,400 bd), Emiratos Árabes Unidos (-34,300 bd) e Irak (-25,500 bd).
La cuestión no explícita que plantean estas cifras es lo que pudiera pasar si los catorce países de la OPEP y sus diez aliados -entre ellos Rusia y México- deciden en su próxima reunión, prevista para junio, abrir los grifos y poner así fin al recorte de la producción petrolera pactado.
La producción de petróleo en Estados Unidos creció fuertemente el año pasado y se espera que aumente en 2,7 millones de barriles por día (bpd) a 12,1 millones de bpd hacia 2023, ya que la mayor actividad en campos de esquisto compensaría las disminuciones en el suministro convencional.
La OPEP tiene un objetivo de producción implícito para 2018 de 32,73 millones de bpd, basado en los recortes detallados a finales de 2016 y teniendo en cuenta los cambios de membresía desde entonces, más las expectativas de Nigeria y Libia sobre la producción de este año.
Para la mayoría de los saudíes, el programa de reformas iniciado en 2016 y bautizado con el nombre de "Visión 2030" no es un mero plan burocrático de liberalización económica que hay que acatar, sino una oportunidad de cambio en sus vidas cotidianas y una ventana abierta a mayores libertades.
La producción petrolera de Venezuela cayó casi un 13 por ciento en 2017, de acuerdo con datos divulgados el jueves por la OPEP, bajando a su menor nivel en 28 años, lo que agrava la crisis económica y aumenta las posibilidades de una cesación de pagos del país.
La OPEP elevó su nivel de cumplimiento de un pacto de recortes al bombeo en diciembre, ante una menor producción en Venezuela y recortes adicionales de los productores del Golfo Pérsico, lo que muestra un fuerte nivel de compromiso pese al avance de los precios del crudo.
