VOX DEI
«No temas. Desde ahora serás pescador de hombres»
La gente se agolpaba sobre Jesús para oír la Palabra de Dios, cuando vio dos barcas que estaban a la orilla del lago. Los pescadores habían bajado de ellas, y lavaban las redes. Subiendo a una de las barcas, que era de Simón, le rogó que se alejara un poco de tierra.