Los partidos políticos de Israel han acordado formar un gobierno de unidad nacional, informó el miércoles un líder opositor. Benny Gantz, exministro de defensa y exjefe del Estado Mayor del ejército, emitió lo que dijo era un comunicado conjunto con el primer ministro Benjamin Netanyahu.
Pero ni Scalise, el segundo republicano de mayor rango en la Cámara de Representantes, ni Jordan, que se desempeña como presidente de la Comisión Asuntos Jurídicos y está respaldado por el expresidente Donald Trump, parecen tener los votos necesarios para asegurar el voto mayoritario.
El líder de la mayoría en el Senado de Estados Unidos, Chuck Schumer, dijo el lunes que estaba agradecido por un comunicado en que China condena el asesinato y secuestro de civiles israelíes y extranjeros por parte de Hamas, el cual fue emitido durante una visita bipartidista del Congreso a Beijing
La coalición de gobierno de Netanyahu —la más religiosa y nacionalista de la historia de Israel— aprobó en marzo una enmienda conocida como “ley de incapacidad”, la cual permite que un primer ministro sea considerado no apto para gobernar únicamente por razones médicas o de salud mental.
El recién designado enviado de Arabia Saudí a la Autoridad Palestina visitó Cisjordania por primera vez el lunes para presentar sus credenciales y dialogar con funcionarios palestinos, en un viaje vinculado a los esfuerzos estadounidenses por lograr una normalización de relaciones.
Esta semana la protagonista de la manifestación ha sido una enorme pancarta con una fotografía de Netanyahu y la frase "Dictador a la fuga", en referencia al viaje del mandatario a Estados Unidos, donde también ha habido protestas contra la reforma judicial.
"Estados Unidos es indispensable en estos esfuerzos", ha dicho el jefe del Gobierno de Israel, que confía también en la ayuda de Washington para culminar el acercamiento a Arabia Saudí, pese a las discrepancias públicas que ha habido entre los dos socios en estos últimos dos años.
El primer ministro israelí tuvo su encuentro, largamente deseado, con el presidente Joe Biden el miércoles, el primero desde que Benjamin Netanyahu asumió al frente de un gobierno de extrema derecha a fines del año pasado.
La reunión anual de la Asamblea General de la ONU que congrega a los mandatarios de distintos países ya está aquí, y con ella una serie de acrónimos, abreviaturas, títulos y términos que pueden ser confusos para los observadores.
Los gobernantes de un mundo fracturado por la guerra, el cambio climático y la desigualdad persistente escucharon el martes el llamado del jefe de las Naciones Unidas a tomar medidas frente a los grandes retos de la humanidad y a que presenten sus propias evaluaciones.
Según remarcó, Netanyahu comparó a los manifestantes israelíes con Irán o la OLP para referirse a que cuando este "represente al Estado de Israel en la ONU, ciudadanos israelíes se manifestarán al mismo tiempo que la OLP y el BDS (organización que promueve el boicot a Israel)".
Biden tratará una serie de temas como el cambio climático, la guerra en Ucrania y la seguridad, dijo el viernes a la prensa el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, antes de la reunión de líderes mundiales de la próxima semana en las Naciones Unidas.
Con el reclamo del secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, de lograr un mundo más justo para los países en desarrollo comenzó el viernes en Cuba una cumbre de representantes de más de un centenar de Estados.
Cientos de hombres ultraortodoxos el miércoles bloquearon una intersección principal en Jerusalén, provocando un gran atasco del tráfico y trastornos al transporte público, en protesta por el arresto de un joven que se negó a acatar la ley del servicio militar.
Corrientes políticas palestinas el miércoles atacaron a decenas de académicos palestinos que criticaron las declaraciones recientes del presidente Mahmud Abbas sobre el holocausto, las que suscitaron acusaciones generalizadas de antisemitismo.
La Corte Suprema de Israel abrió el martes el primer caso que examina la legalidad de la polémica reforma judicial propuesta por el primer ministro, Benjamin Netanyahu, agravando un enfrentamiento con el gobierno de ultraderecha que ha dividido amargamente al país.
"Estamos intentando lograr acuerdos en materia de seguridad para que asuman su responsabilidad en temas que les afectan en la vida diaria, la Zona A, para que las Fuerzas Armadas israelíes no tengan que entrar en los campos de refugiados de Yenín o Nablús en su lugar", ha relatado.
Decenas de manifestantes israelíes llenaron el lunes las calles en torno a la vivienda del ministro israelí de Justicia, el ideólogo de la divisiva reforma judicial en el país, el día antes de una crucial vista en la que la Corte Suprema decidirá si acepta la reducción de sus poderes.
El presidente Joe Biden nominó al exsecretario del Tesoro, Jacob Lew, como nuevo embajador estadounidense en Israel, anunció el martes la Casa Blanca.
El primer ministro israelí ha indicado además que el último ataque se saldó con la muerte de Batsheva Nigri, de 42 años y madre de tres hijos. "Israel continuará con su política de mantener la seguridad al tiempo que garantiza la libertad de circulación tanto para israelíes como para palestinos".
