El gobierno de Estados Unidos pidió a sus connacionales que no viajen a Colima, Guerrero, Michoacán, Sinaloa y Tamaulipas, y les exhortó a reconsiderar sus visitas a Chihuahua, Coahuila, Durango, Jalisco, el Estado de México, Morelos, Nayarit, Nuevo León, San Luis Potosí, Sonora y Zacatecas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que ya no puede haber más pruebas de que la guerra contra el narcotráfico fue “fatal y fallida”, y condenó las burlas hacia su política de “abrazos, no balazos”.
López Obrador aseguró el lunes que México no investigará a quienes colaboraron con el exsecretario de Seguridad Genaro García Luna, detenido la semana pasada en Estados Unidos y acusado de colaborar con el Cártel de Sinaloa, pero los animó a colaborar con la justicia del país vecino.
La investigación que realiza la Fiscalía General de la República de México contra Genaro García Luna por numerosos delitos tiene largos antecedentes, indicaron hoy fuentes de esa entidad.
La fiscalía general mexicana dijo que pedirá a Estados Unidos la extradición de Genaro García Luna, un hombre clave en la estrategia de seguridad hace más de una década cuando México lanzó una guerra contra el narcotráfico, una vez que haya completado el expediente en su contra.
Un exsecretario de Seguridad Pública de México fue acusado en Nueva York de aceptar millones de dólares en sobornos para permitir que el cártel Sinaloa operara con impunidad.
El máximo jefe de la policía mexicana durante el Gobierno de Felipe Calderón y gran estratega de la lucha contra el narcotráfico, Genaro García Luna, ha sido detenido en Dallas (Texas, Estados Unidos) este lunes.
Un exfuncionario mexicano fue arrestado en Estados Unidos acusado de permitir que el Cartel de Sinaloa operara en México a cambio de sobornos multimillonarios, informaron el martes fiscales federales en Brooklyn.
El gobierno mexicano desplegó en las calles más soldados que nunca para combatir la inseguridad, pero no alcanza para frenar la violencia que aumenta a niveles históricos.
México no le ofreció “nada” al gobierno de Estados Unidos para que su presidente, Donald Trump, no designara a los cárteles mexicanos de la droga como grupos terroristas, dijo el canciller mexicano en una entrevista con un medio local.
No está claro si México había prometido algo a Trump a cambio de suspender la designación, la cual podría haber causado dolores de cabeza a México. Tal designación podría implicar que México fuera evaluado periódicamente por Estados Unidos acerca de su cooperación para combatir a los cárteles.
El anuncio de Trump de la semana pasada alarmó a México, que lo calificó como “intervencionista”. El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo, por ejemplo, que su país no permitirá otra operación desde Estados Unidos como “Rápido y Furioso” para el rastreo de armas.
Barr planea estar en la Ciudad de México el jueves para reunirse con López Obrador, al igual que con el canciller, el fiscal general y otros funcionarios de seguridad, según un funcionario del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Los familiares de nueve personas con doble nacionalidad, estadounidense y mexicana, que fueron asesinadas en el norte de México el mes pasado dijeron el martes que el presidente Andrés Manuel López Obrador rezó con ellos por la seguridad del país y prometió visitar la región.
Fuerzas de seguridad de México estaban centrados este lunes en la búsqueda de decenas de sicarios que perpetraron el fin de semana un feroz ataque armado contra autoridades en el norte del país, con un saldo de 22 muertos.
Cuando docenas de camionetas llenas de hombres con armas de grueso calibre irrumpieron en Villa Unión, en el estado norteño de Coahuila, los vecinos de la pequeña localidad cerca de la frontera estadounidense empezaron a darse cuenta de que eran el blanco de una invasión de escala militar.
La fiscalía mexicana ha informado este domingo de la detención de “varios individuos”, presuntamente implicados en la matanza de los Langford-LeBarón, a principios de noviembre. Según fuentes del Gobierno federal “son al menos tres”, aunque el número total podría ser mayor.
La marcha busca manifestar la solidaridad de un grupo de mormones que emigraron hace más de un siglo a México desde Estados Unidos cuando las leyes en este último país se endurecieron hacia la práctica de la poligamia, con las familias de víctimas del crimen organizado.
“Si en el caso remoto se tomara una decisión que consideremos afecta muestra soberanía, entonces actuaríamos en el marco de las leyes internacionales. En el caso de que se tomara una decisión que consideráramos contraria al interés nacional, pero lo veo así, improbable”, dijo.
Representantes de los gobiernos de México y Estados Unidos se reunirán la próxima semana para discutir los planes del inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, de incluir a los cárteles mexicanos en la lista de organizaciones terroristas.
