El secretario de Energía de Estados Unidos dijo el jueves que su país debe tener cuidado con la ley que permitiría al gobierno de Trump demandar a la OPEP y a otros productores de petróleo por recortes concertados en el suministro de petróleo, ya que podría tener consecuencias imprevistas.
El petróleo subió un 2 por ciento el miércoles, su segundo día seguido de alzas, apoyado por un inesperado declive en las existencias en Estados Unidos y luego de que Arabia Saudita se mostró indiferente a la presión de Washington para que la OPEP abandone sus esfuerzos por apuntalar los precios.
Los precios del petróleo subieron el martes tras noticias de que la OPEP seguiría aplicando recortes a la producción, pese a la presión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien en la víspera criticó al grupo por apoyar el alza del barril.
En base a los actuales datos del mercado, los miembros de la OPEP y otros productores independientes aliados entre ellos Rusia, “probablemente sigan con los recortes a la producción hasta fines de año”, agregó la fuente a Reuters.
Las empresas estadounidenses quieren que las negociaciones con Beijing les reporten un mejor acceso a la economía china, controlada por el estado, no solo una reducción del superávit comercial, ante el mantenimiento de los aranceles de Washington mientras continúa el diálogo comercial.
La OPEP y sus aliados mantendrán un acuerdo de reducción al bombeo, y quieren lograr un mayor nivel de adherencia al trato pese a que el presidente estadounidense, Donald Trump, ha pedido al bloque frenar la iniciativa de impulsar los precios del crudo, dijo el martes una fuente .
El presidente Donald Trump anunció el domingo que ampliará el plazo que dio a Beijing antes de aumentar los aranceles estadounidenses a las importaciones chinas, citando “avances sustanciales” en las negociaciones comerciales realizadas el fin de semana entre los dos gobiernos.
Los precios del petróleo tocaron el viernes su máximo nivel en lo que va del año y sumaron su segunda semana seguida de alza, impulsados por las esperanzas de que Washington y Pekín alcanzarán un acuerdo comercial pronto, pero un récord en el suministro de crudo en Estados Unidos limitó el alza.
Los negociadores avanzaron y extenderían las conversaciones por dos días más, sostuvo Trump en diálogo con periodistas en la Casa Blanca, donde se reunió con el viceprimer ministro chino, Liu He.
Los principales negociadores de Estados Unidos y China se reunieron el viernes para cerrar una semana de conversaciones que ha visto a ambas partes esforzándose para detallar cómo reducir las profundas diferencias sobre el rol de Pekín en el comercio mundial.
Estados Unidos y China reanudaron el jueves las conversaciones de alto nivel para tratar de aliviar una guerra comercial que ha enervado a inversionistas en todo el mundo y empañado el panorama de la economía global.
El gobierno de Donald Trump retomará el jueves las conversaciones de alto nivel con funcionarios de China para tratar de aliviar una guerra comercial que ha enervado a inversionistas en todo el mundo y empañó las perspectivas de la economía global.
Los temores del mercado sobre las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China había contribuido a la baja de los precios más temprano, pero luego revirtieron la tendencia ante los progresos suscitados el miércoles, lo que también ayudó a respaldar a las plazas bursátiles.
Estados Unidos debería respetar el derecho de China a desarrollarse y convertirse en un país próspero, dijo un alto cargo del Gobierno chino a una delegación de EU que estaba de visita, reiterando que las puertas del país al exterior se abrirían aún más al exterior.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el martes que las conversaciones comerciales con China marchan bien y sugirió que estaba abierto a retrasar un plazo límite para completar las negociaciones, asegurando que el 1 de marzo no era una fecha “mágica”.
Una voz débil llega a través de la línea telefónica con interferencias. Al otro lado, desde una prisión de contrainteligencia militar en la capital de Venezuela, Tomeu Vadell pregunta a sus hijas en Louisiana si fueron a la iglesia y les cuenta que planea pasar su domingo haciendo flexiones.
El zar de la economía china viajaba a Washington el martes para participar en conversaciones el jueves y el viernes que buscan cerrar una guerra comercial provocada por las ambiciones tecnológicas de Beijing antes de que entre en vigor una nueva subida de aranceles estadounidenses.
Medios estatales chinos expresaron el sábado un cauteloso optimismo sobre las conversaciones comerciales entre Estados Unidos y China, un día después de que el presidente Xi Jinping dijera que las discusiones que se habían alargado ya una semana habían hecho avances “paso a paso”.
China y Estados Unidos siguen hoy aquí tras la búsqueda de un acuerdo que dé fin al conflicto económico-comercial, pero además satisfaga sus intereses, estrategias y negocios tanto en el plano bilateral como global.
La posibilidad de que haya una recesión en Estados Unidos en los próximos 12 meses es de una en cuatro, un escenario que debería evitar que la Reserva Federal suba las tasas de interés el próximo mes, de acuerdo a un sondeo de Reuters.
