La Unión Europea vivirá este 31 de enero su particular Nochevieja, mucho más amarga que las habituales de fin de año. Será sin uvas, pero dejará una gran resaca geopolítica, social y económica provocada por la salida del Reino Unido de la Unión 47 años después de su ingreso.
Rebelión en los gestos y pulcritud jurídica en las decisiones. El Parlamento de Escocia ha decidido, con el apoyo del Gobierno nacionalista, que la bandera de la Unión Europea seguirá ondeando en el palacio de Holyrood (la sede de la Asamblea autónoma) a partir de la medianoche de este viernes.
El debate crucial sobre la comparecencia de nuevos testigos en el juicio a Donald Trump ha comenzado este viernes con el Senado fraccionado. Los demócratas necesitan que al menos cuatro republicanos voten sí a pedir más declaraciones y nuevos documentos.
Los líderes de la Unión Europea trataban de poner buena cara el viernes, el día del Brexit, diciendo que los restantes 27 países del bloque afrontarán el cambio climático y la transformación generada por las tecnologías, pese a la pérdida a un Estado miembro por primera vez en su historia.
Gran Bretaña inició el viernes como miembro de la Unión Europea, pero abandonará oficialmente el bloque a las 23:00 horas locales, medianoche en Bruselas (2300 GMT), tres años y medio después de que el país decidiera en referéndum, por un margen de apenas 52%-48%, separarse del organismo.
A unas horas de que el Reino Unido ponga fin a 47 años de membresía en la Unión Europea, los principales funcionarios del bloque se comprometieron el viernes a seguir cumpliendo un papel prominente “en la creciente cacofonía del mundo”, a pesar de la pérdida de un afiliado poderoso.
El senador republicano por Tennessee Lamar Alexander se opondrá a la citación de más testigos en el juicio político al presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Su decisión frustraría los esfuerzos de los demócratas para escuchar nuevos testimonios.
De visita en Kiev, el secretario de Estado norteamericano Mike Pompeo aseguró el viernes a que el gobierno del presidente Donald Trump no vacilaría en dar su apoyo a Ucrania y negó los cargos en el centro del juicio político a Trump, contradiciendo lo afirmado por varios testigos.
El senador republicano Rick Scott de inmediato criticó el trato. En una carta dirigida a la firma dijo que exhortaría a sus colegas del Senado a seguir su ejemplo y boicotear a la firma hasta que corte lazos con el “peligroso dictador”.
El líder de la oposición venezolana Juan Guaidó concluirá una gira internacional con un evento en Miami el fin de semana del Super Bowl, con la incógnita de si podrá lograr una importante reunión con el presidente Donald Trump.
El primer ministro de Israel, Benjamijn Netanyahu, ha defendido este jueves ante el presidente de Rusia, Vladimir Putin, que el acuerdo propuesto por Estados Unidos representa "una oportunidad nueva y quizás única" para firmar la paz con los palestinos.
Un día antes de que su país salga de la Unión Europea, el primer ministro británico recibió el jueves al secretario de Estado estadounidense, quien subrayó los "enormes beneficios" para ambos países del acuerdo comercial posbrexit que se disponen a negociar.
Todo lo que podía salir mal sucedió. Su juicio coincidió con la petición de extradición a Estados Unidos desde Israel del hacker ruso Alexei Burkov, a quien el Kremlin había brindado protección consular.
El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, abrió la sesión del jueves anticipando un intento del senador Rand Paul de Kentucky de revelar el nombre del aún anónimo informante en el juicio público. McConnell exhortó a sus colegas a guardar la cordura.
El secretario de Estado norteamericano Mike Pompeo dijo el jueves en Londres que Estados Unidos y Gran Bretaña mantendrán y mejorarán su relación especial una vez el Reino Unido salga de la Unión Europea esta semana.
“El valle del Jordán, que resulta vital para la seguridad nacional de Israel, quedará bajo soberanía israelí”. El plan de paz de Donald Trump, presentado el martes en la Casa Blanca en ausencia de representantes palestinos, no dista tanto del propuesto por Bill Clinton al final de su mandato.
Para muchos británicos que viven en ciudades y pueblos de Europa, en la medianoche del viernes Brexit actuaba como una guillotina electoral que acaba con su derecho al voto y a postularse a cargos públicos.
Luego de varios años de calma en sus relaciones, se produjo un cambio radical cuando representantes de los estados árabes del golfo Pérsico acudieron esta semana a la presentación de un plan de paz para israelíes y palestinos del presidente Donald Trump que favorece enormemente a Israel...
Con tristeza, cierto apoyo al Brexit e incluso la esperanza de un regreso, los europeos de los 27 miembros restantes de la UE se despidieron del Reino Unido en la víspera de su histórica partida.
El viernes será un día verdaderamente histórico en el que casi nada sucederá: bajarán algunas banderas británicas de los edificios de la Unión Europea en Bruselas mientras otras ondearán en manos de brexiteros jubilosos en Londres, celebrando el momento de la salida.
