Johnson ganó el martes las elecciones primarias en el Partido Conservador que comenzaron el pasado 10 de junio con una decena de aspirantes a suceder a May, quien dimitió después de tres intentos fallidos de que el Parlamento aprobara el acuerdo del Brexit negociado por Londres y Bruselas.
La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, se ha sometido a su última sesión de control en el Parlamento, antes de renunciar al cargo para dar paso a Boris Johnson, y lo ha hecho protagonizando un duro choque con el líder laborista, Jeremy Corbyn, al que incluso ha animado a dimitir.
El Palacio de Buckingham dijo el miércoles que la primera ministra Theresa May presentó su renuncia a la reina Isabel II, lo que allana el camino para que asuma Boris Johnson como su sucesor.
El Partido Conservador británico ha puesto todas sus esperanzas en Boris Johnson para salir de su actual estado de ruina. El exalcalde de Londres ha vencido en las primarias tories, con el 66% de apoyo y 92.153 votos, frente a su rival, el ministro de Exteriores, Jeremy Hunt.
Jeremy Corbyn se ha resistido a abandonar su calculada ambigüedad sobre el Brexit, que respondía en parte a su propio historial euroescéptico, pero también a la necesidad de no soliviantar a una base tradicional de votantes que respaldaron la salida de la UE en 2016.
El laborismo opositor dio un importante viraje el martes al afirmar que el gobierno debería convocar a un referendo sobre la salida o permanencia del país en la Unión Europea.
Boris Johnson y Jeremy Hunt prometieron gastar miles de millones de libras en servicios públicos, infraestructuras y recortes de impuestos el domingo como parte de su lucha por convertirse en primer ministro, presentándose los dos como el mejor candidato para vencer al opositor Partido Laborista.
Diputados proeuropeos intentarán la semana que viene impedir que el nuevo primer ministro saque a Reino Unido de la Unión Europea sin un acuerdo y en contra de la voluntad del Parlamento, mediante el bloqueo de parte de la financiación pública.
Boris Johnson y el ministro de Relaciones Exteriores Jeremy Hunt emergieron el jueves como los únicos dos candidatos restantes en la carrera para reemplazar a la primera ministra de Reino Unido, Theresa May, en la que el exalcalde de Londres aparece como el favorito para ser elegido el mes próximo.
El opositor Partido Laborista británico dijo el martes que intentará tomar el control de la agenda parlamentaria el 25 de junio con el fin de dar a los legisladores la oportunidad de introducir leyes destinadas a evitar un Brexit sin acuerdo.
El exsecretario de Relaciones Exteriores Boris Johnson intensificó el domingo su campaña para convertirse en el próximo primer ministro de Gran Bretaña al desafiar a la Unión Europea por los términos del Brexit.
Theresa May ha enviado este viernes a la dirección del Partido Conservador la carta oficial en la que confirma su renuncia al liderazgo de la formación. A partir de ahora, se mantendrá de modo interino en ese puesto.
El Partido Laborista, en la oposición en Reino Unido, logró mantener el viernes por un estrecho margen un escaño parlamentario en el este de Inglaterra, saliendo airoso del desafío del Partido del Brexit de Nigel Farage con un victoria por menos de 700 votos.
La primera ministra británica Theresa May renuncia formalmente el viernes al liderato del Partido Conservador, derrotada por el dilema del Brexit. No estaba previsto un acto público para señalar el evento, un lamentable final para el mandato de May.
Los dos líderes han reiterado su compromiso para que sus respectivos países cierren un acuerdo comercial una vez que Reino Unido haya abandonado la Unión Europea.
Donald Trump ha ido más allá en su forcejeo con la oposición laborista y ha descrito a su líder Jeremy Corbyn como "una fuerza negativa". El presidente norteamericano ha confirmado que Corbyn pidió una cita con él durante su visita de Estado a Reino Unido, pero que prefirió no verle.
La concentración partió a media mañana de Trafalgar Square, con el popular "Baby Trump" volando sobre las cabezas de los manifestantes y acompañado esta vez del robot gigante "Dumping Trump", made in China, que se convirtió en la gran atracción.
Miles de personas protestaron el martes en el centro de Londres contra la pomposa visita de Estado a Reino Unido del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pero eran menos de las que se reunieron para oponerse a su viaje del año pasado.
Donald Trump no ha podido contenerse este martes, porque del asunto político más complejo al que se ha enfrentado en décadas el Reino Unido “lo entiende todo perfectamente”, dijo. Junto a una Theresa May ya en retirada, ha alentado un Brexit duro y sin acuerdo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que Reino Unido debería negarse a pagar los 39,000 millones de libras correspondientes a su divorcio de la Unión Europea y “alejarse” de las conversaciones del Brexit si Bruselas no le concede lo que quiere.
