El ataque de este fin de semana contra importantes instalaciones petroleras sauditas -del que los gobiernos de Riad y Washington culpan a Irán- ha vuelto a tensionar las relaciones entre los dos países.
Rusia está cambiando. Las señales del descontento social y de la erosión del putinismo son múltiples y llegan discreta, pero regularmente, desde hace algunos años, de la extensa geografía rusa.
Las imágenes de manifestantes en Hong Kong destrozando cámaras de vigilancia simbolizan mejor las protestas en el territorio semiautónomo de China que las fotos de riadas humanas o incluso las de la toma del aeropuerto.
La situación en Hong Kong ha entrado en una espiral de tensión y violencia que hace cada vez más difícil encontrar una salida negociada a la crisis. Esta antigua colonia británica, un territorio chino que cuenta con un estatuto especial, se ha visto desde junio engullida por una oleada de protestas
Una triple ofensiva, con recursos en los tribunales para anular la suspensión, llamadas a la ciudadanía para bloquear las calles y un último intento en el Parlamento de prohibir por ley la salida desordenada de la UE, anticipan una semana decisiva en la historia del país.
Lam es uno de los pocos fotógrafos de un medio occidental que ha cubierto las protestas en Hong Kong desde el principio. Él estaba ahí cuando los manifestantes irrumpieron en el aeropuerto y las estaciones de trenes, y cuando fueron atacados por hombres misteriosos enmascarados.
El paradigma de la alianza a ultranza de Donald Trump con Benjamín Netanyahu, por el que Washington hacía suya la política de Israel en Oriente Próximo, parece estar cuestionado.
Ya eran las diez y doce de la noche. Las urnas habían cerrado más de cuatro horas antes, había rumores, crecía la expectativa y la autoridad electoral seguía sin dar un solo número cuando el presidente Mauricio Macri apareció en televisión y dijo: “Hemos tenido una mala elección”.
Rentas más caras que las de Nueva York, Londres o San Francisco por apartamentos de la mitad del tamaño. Casi una de cada cinco personas vive en la pobreza: un salario mínimo de 4,82 dólares la hora.
Una confrontación básicamente tecnológica, asimétrica y mediática, con ramificaciones internacionales, con potencialidad para convertirse en mundial y de resultado incierto.
La sirena produce escalofríos. Y no es un giro poético. A las 9.53 de cada 18 de julio, un sonido agudo recorre el cuerpo, mientras cientos de personas levantan fotos con rostros en el lugar donde un coche bomba cargado con 400 kilos de explosivos destruyó en 1994 la sede de siete pisos de la AMIA.
Faltan cuatro meses para los comicios presidenciales en Argentina. En el país en el que la política, el deporte y la farándula se mezclan a menudo, todos esperaban que las elecciones fueran el equivalente a un juego de Boca contra River.
La cancelación en el último momento de un ataque militar estadounidense contra Irán va mucho más allá de un nuevo incidente en la creciente tensión entre ambos países y debe ser considerado como un peligrosísimo precedente que por el bien de todos es mejor que no vuelva a repetirse.
Mientras que en la famosa Revolución de los paraguas de 2014 los manifestantes, a pesar del ruido y la atención generada, fueron una minoría, la manifestación del domingo sí escenificó un “sentir general”. Acudieron personas mayores, familias, hombres de negocios y sectores conservadores.
Hong Kong vive una movilización popular sin precedentes ante el intento de introducir un cambio legal que permita la extradición de sus ciudadanos a China. La protesta de los hongkoneses va más allá, porque consideran que está en peligro el estatuto concedido al antiguo territorio británico.
Hong Kong es el nudo de las libertades civiles. Lo que allí suceda desborda los límites bien reducidos de la superficie de la ciudad autónoma, mayor que Vizcaya y menor que Álava, y por supuesto los derechos de sus habitantes, aproximadamente tantos como los que hay en Cataluña.
¡Mayday, Mayday! Grita la Gran Bretaña que está a la deriva y no encuentra su rumbo para aterrizar. Densos nubarrones cubren su horizonte y su capitán, la primera ministra Theresa Mary May ha dejado de gobernar de facto. Ahora deja el mando del gobierno a quien vaya a tomar su lugar.
La brutal represión de las protestas de estudiantes y trabajadores que tuvieron lugar en la plaza de Tiananmen entre abril y junio de 1989 sigue siendo un tema tabú ahora que se cumple su trigésimo aniversario, entre otras cosas.
El nuevo orden del sistema internacional deja claro que las potencias globales o muestran su indiferencia ante los conflictos, o intervienen, alimentándolos deliberadamente para debilitar a sus enemigos.
Con las urnas todavía vacías y la campaña de las elecciones europeas por empezar en algunos países, los 27 Gobiernos de la UE se enzarzaron este jueves en Sibiu en un primer rifirrafe sobre el reparto de poder tras los comicios del 26 de mayo.
