* La soja también encontró apoyo después de que los exportadores vendieron 159.350 toneladas métricas de soja estadounidense a destinos desconocidos a primera hora del lunes, según el USDA. Los exportadores también vendieron 111.770 toneladas métricas de maíz a México, dijo el USDA.
* El número de buques que buscan recoger cargamentos de grano en la zona del mar Negro ha caído un 35% esta semana, respecto de la anterior, con una creciente incertidumbre sobre si el tráfico comercial podría verse afectado mientras Rusia sigue atacando instalaciones portuarias en Ucrania.
Los futuros de la soja también cedían ante la mejora de las calificaciones de los cultivos estadounidenses, mientras que el trigo tocó un mínimo en más de dos meses. La aversión al riesgo en los mercados de materias primas y de renta variable ejercía presión sobre los cereales, según analistas.
Los precios a nivel mundial de los productos alimenticios como arroz y aceite vegetal aumentaron por primera vez en meses luego que Rusia se retirara de un acuerdo de tiempos de guerra que permitía que Ucrania enviara granos al mundo y de que India restringiera algunas de sus exportaciones de arroz
Las exportaciones de cebada de la UE totalizaron 390.412 toneladas, un 69% menos que los 1,26 millones del periodo correspondiente de 2022/23, mientras que las importaciones de maíz de la UE se situaron en 1,17 millones de toneladas, un 28% menos que los 1,63 millones de un año antes.
El trigo de Chicago subía el viernes tras el ataque de un avión no tripulado ucraniano cerca de un centro de exportación ruso en el Mar Negro, lo que reavivó los temores sobre la oferta mundial, mientras que la India aumentó las expectativas de demanda al considerar la eliminación de los aranceles.
“El conflicto en Ucrania también ha traído consigo dificultades para los países en desarrollo y el sur global, en especial en lo que respecta a escasez de combustible, alimentos y fertilizantes. Pakistán no es la excepción”, dijo Bilawal Bhutto Zardari, ministro de Relaciones Exteriores.
El clima de agosto sigue siendo el centro de atención, después de que la correduría de materias primas Stonex proyectara el rendimiento promedio de la soja estadounidense para 2023 en 50,5 bushels por acre (bpa), por debajo de la última proyección del USDA de 52,0 bpa.
El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo el miércoles a su par turco, Tayyip Erdogan, que Moscú está dispuesto a retomar el acuerdo del Mar Negro tan pronto como Occidente cumpliera sus obligaciones en relación con las exportaciones de grano de la propia Rusia.
Los futuros del trigo estadounidense escalaron un 8,6% el lunes, alcanzando su máximo diario en la Bolsa de Chicago (CBOT), después de que Rusia atacara puertos e infraestructuras de cereales ucranianas, incluido el primer ataque a los almacenes de grano del río Danubio.
Rusia anunció el lunes que se retiraba del acuerdo, y el miércoles, los ataques rusos en las zonas portuarias del sur de Ucrania destruyeron parte de su infraestructura crítica de exportación de grano, así como 60,000 toneladas de grano que estaban destinadas a China.
“El patrón impredecible de las lluvias nos está afectando porque el trigo es plantado inmediatamente después de la temporada de lluvias, pero en ocasiones plantamos pensando que la lluvia ya terminó, sólo para que comience de nuevo, lo cual arruina las semillas”, dijo Salisu, de 48 años.
La ONG Acción contra el Hambre ha advertido este martes sobre las devastadoras consecuencias para la región del Sahel tras la no renovación del acuerdo del grano ucraniano y ha condenado el uso político del mismo.
África Oriental, por ejemplo, ha sufrido graves sequías e inundaciones que han destruido las cosechas de 2,2 millones de personas que dependen de la agricultura para su subsistencia, afirmó Shashwat Saraf, director regional de emergencias del grupo para África Oriental.
En marzo y mayo, Rusia se negó a ampliar el pacto durante más de 60 días, en lugar los 120 habituales. La cantidad de grano enviado al mes cayó desde el récord de 4,2 millones de toneladas en octubre a 1,3 millones de toneladas en mayo, el nivel más bajo desde que se firmó el acuerdo.
Las lluvias de los últimos días redujeron la proporción de la producción de maíz estadounidense ubicada en una zona de sequía al 64% el 11 de julio, frente al 67% de la semana anterior. Un año antes, sólo el 30% de la cosecha se encontraba en una zona de sequía, según el USDA.
* El acuerdo, mediado por Naciones Unidas y Turquía en julio pasado, tenía como objetivo aliviar una crisis alimentaria mundial al permitir que el grano ucraniano bloqueado tras la invasión rusa de febrero de 2022 se exportara de forma segura.
Rusia anunció este lunes que suspendió un acuerdo de guerra sin precedentes que permitía exportar grano desde Ucrania a países en África, Oriente Medio y Asia donde el hambre es una creciente amenaza y los altos precios de la comida han sumido a más gente en la pobreza.
* Las materias primas agrícolas en general se vieron reforzadas el viernes por la reciente debilidad del dólar estadounidense, que estaba a punto de terminar la semana a la baja con la Reserva Federal cerca del final de su ciclo de subidas de tasas por una inflación cada vez más baja.
El USDA recortó su estimación de rendimiento del maíz estadounidense a 177,5 bushels por acre, cuatro bushels menos que el mes pasado, reflejando el impacto de las condiciones secas de junio, pero el menor rendimiento se vio compensado por una mayor estimación de plantaciones.
