NACIONAL - Seguridad y Justicia
Exhuman 42 osamentas de fosa clandestina en desierto
Las autoridades exhumaron 42 osamentas de una fosa clandestina en el desierto mexicano cerca del pueblo costero de Puerto Peñasco, en el Golfo de California.
Las autoridades exhumaron 42 osamentas de una fosa clandestina en el desierto mexicano cerca del pueblo costero de Puerto Peñasco, en el Golfo de California.
En un terreno del gobierno a las afueras de la ciudad de Culiacán, en el noroeste de México, hay en torno a una docena de vehículos calcinados, incluidos un auto patrulla, una camioneta militar y un tráiler. Todos quedaron fuera de servicio tras un reciente y aterrador tiroteo.
Un grupo de voluntarios halló 12 esqueletos y un cadáver en descomposición en una brecha en el desierto del estado de Sonora, cerca del turístico Puerto Peñasco, en el norte de México, informaron las autoridades.
El enfrentamiento del día 17 en la capital, Culiacán, acabó con 14 muertos, según la Secretaría de Seguridad Pública, cuatro de ellos víctimas circunstanciales, otros eran supuestos sicarios y algunos del ejército.
"No deben funcionarios de otros países opinar sobre asuntos internos que solo corresponden a nuestro Gobierno, es hasta de mal gusto hacerlo. Imagínense que yo declare de que está mal la estrategia en Estados Unidos porque permiten, sin control, la venta de armas que se introducen a México".
El número de muertos a causa de los enfrentamientos de la semana pasada entre miembros del crimen organizado y las fuerzas federales en Culiacán subió a 13 personas, informaron el miércoles las autoridades del estado de Sinaloa, en el noroeste de México.
Los residentes de Culiacán, en el noroeste de México, intentaron retomar sus rutinas el martes, cinco días después de que hombres armados del cártel de Sinaloa sembraron terror en toda la ciudad.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró este martes que no fue informado sobre el operativo que elementos de las fuerzas federales llevarían a cabo para cumplir una orden de captura contra Ovidio Guzmán López el pasado 17 de octubre, en Culiacán.
Autoridades localizaron el martes en el corazón de la populosa Ciudad de México dos túneles para el trasiego de drogas, laboratorios para elaborar metanfetaminas y armas de alto poder, en medio de la creciente violencia que golpea al país.
Las autoridades de Sinaloa están enfocadas en recapturar a 47 delincuentes fugados el jueves 17 de octubre en medio del caos provocado por la ofensiva del cartel para liberar a Ovidio Guzmán López, hijo del capo Joaquín El Chapo Guzmán.
Los mexicanos estaban divididos el lunes sobre si el gobierno hizo lo correcto al dejar en libertad al hijo de un capo del narcotráfico luego de que sus cómplices desataron un tiroteo en la ciudad de Culiacán, en el norte del país.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha indicado este lunes que su Gobierno intentará detener a Ovidio Guzmán, hijo del antiguo líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín 'El Chapo' Guzmán, sin poner en peligro a la población, tras el fallido operativo de la semana pasada.
El canciller Marcelo Ebrard anunció que concluyó una reunión entre funcionarios estadounidenses y mexicanos para “congelar” el tráfico ilícito de armas hacia México, una demanda del Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para el combate de la violencia generara por el tráfico de drogas
El fiscal general de México dijo el lunes que su despacho investigará las circunstancias que condujeron a la liberación de Ovidio Guzmán, uno de los hijos del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, retenido brevemente la semana pasada durante un operativo de las fuerzas de seguridad.
La mano de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) habría estado detrás la fallida operación para detener a Ovidio Guzmán, hijo del famoso jefe del narcotráfico Joaquín "El Chapo" Guzmán.
El 2019 se perfila como el año más violento desde que se tiene registro estadístico del crimen en México, de acuerdo con recientes cifras oficiales sobre la actividad de la delincuencia organizada, entre enero y septiembre pasado.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo el lunes que su Gobierno intentará detener a Ovidio Guzmán, uno de los hijos del famoso narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, si existe orden de aprehensión, pero sin poner en riesgo a la población.
El Ejército y la Marina de México han sido la columna vertebral en 13 años de la lucha contra el crimen lanzada por el entonces presidente Felipe Calderón en 2006, pero ahora la moral militar está por los suelos y el gobierno intenta levantarle los ánimos.
Los acontecimientos en Sinaloa, Michoacán y Guerrero esta semana, incluida una fallida operación para arrestar a un hijo del legendario capo de la droga Joaquín “El Chapo” Guzmán, han generado serias dudas sobre la efectividad de su nueva estrategia de seguridad.
A través de una llamada telefónica, el mandatario Andrés Manuel López Obrador y su homólogo Donald Trump convinieron que funcionarios de los dos países se reúnan la próxima semana para discutir las medidas a tomar a través de la frontera común, agregó el funcionario.