Tanto la gran banca como ejecutivos de empresas y legisladores republicanos han abogado por mantener la medida y defienden que si se termina será más difícil para los entes absorber el dinero que el banco central ha introducido en el sistema financiero, facilitar el comercio de deuda pública...
Los mayores bancos centrales del mundo vivirán tranquilos con una mayor inflación y los inversores que ahora apuestan agresivamente por un fin más rápido del estímulo monetario podrían equivocarse.
"Los efectos secundarios del fuerte repunte de la rentabilidad de los bonos de las últimas veinticuatro horas siguen sintiéndose y los inversores adoptan una postura de aversión al riesgo", añade Michael Hewson, de CMC Markets, en declaraciones recogidas por EFE Dow Jones.
El selectivo S&P 500 descendió un 0,47 % o 18,19 puntos, hasta 3.811,15, mientras que el Nasdaq, que aglutina a las tecnológicas más importantes, fue el único de los tres índices principales que consiguió terminar en verde, al avanzar un 0,56 % o 72,91 unidades, situándose en 13.192,34 puntos.
La mera expectativa de que la inflación entre en escena, toda una novedad tras años de precios estables —cuando no directamente a la baja—, está empezando a alterar el equilibrio en los mercados financieros a ambos lados del Atlántico.
Según Powell, la pandemia del coronavirus ha dejado una "huella significativa" en la inflación en EU y la recuperación aún es incompleta, por lo que la economía seguirá necesitando extraordinario apoyo monetario por un tiempo.
Es un mantra que ha ayudado a los fondos de cobertura y a los operadores minoristas, al tiempo que las acciones de Estados Unidos atravesaron una serie de retrocesos en su camino hacia un repunte de 75% desde marzo. Y si bien es demasiado pronto para decir si la carnicería del martes persistirá.
En el mercado de la energía, el petróleo West Texas Intermediate (WTI), el de referencia en EU para entrega en abril bajaba el 0,23 % hasta 61,56 dólares, aunque se mantenía en el nivel de los 61 dólares, el más alto en 13 meses, tras el recorte de suministro que ha provocado la ola de frío
Los expertos consultados bajan el tono de alarma. La idea más extendida es que los mercados vislumbran ya el fin de la crisis económica provocada por la pandemia que, gracias a las vacunas, podría superarse a lo largo del segundo semestre del año.
“Con tanto estímulo desplegado, tratar de averiguar si la economía está en recesión es como tratar de evaluar si uno tuvo fiebre después de tomarse una gran dosis de aspirina”, escribió el inversor Seth Klarman en una carta a clientes de su exclusivo fondo Baupost, según el Financial Times.
El banco central que preside tampoco alterará su programa de compra de activos, que actualmente engulle mensualmente por los menos hasta 80,000 millones de dólares en bonos del Tesoro de EU y otros 40,000 millones de dólares en activos respaldados por hipotecas.
Clorox, fabricante de productos de limpieza y desinfección, es otra de las empresas que se acerca a la subida del 5% en bolsa. La compañía ha anunciado que ha cumplido su objetivo de usar energía renovable al 100% para sus operaciones en EU y Canadá cuatro años antes de lo que tenía previsto.
De acuerdo con estas cifras, aquellos nacidos entre 1981 y 1996 han visto como desde el tercer trimestre de 2016 hasta el tercer trimestre del año pasado, el valor de sus activos acumulados pasó de los 5,09 billones de dólares hasta los 10,26 billones de dólares.
Entre los valores destacados de la sesión está General Motors, cuyas acciones se disparan un 9% hasta los 54.4 dólares, después de que Microsoft se haya unido a la empresa conjunta liderada por General Motors llamada Cruise, cuyo objetivo es la producción de vehículos autónomos.
Según algunos indicadores, los estadounidenses se volvieron más ricos durante la pandemia que en cualquier otra época. Es algo difícil de comprender dado el colapso económico y el aumento de los desempleados, las personas sin hogar y aquellos que pasan hambre.
El rally en Wall Street podría estar cerca de llegar a su fin. Es la opinión del economista jefe de Goldman Sachs, Jan Hatzius, que asegura que las acciones de los principales índices y mercados de bonos estadounidenses se podrían "tomar un respiro" en el corto plazo, tal y como recoge CNBC.
La decisión de la Fed en su reunión del 15 y 16 de diciembre de dejar sin cambios sus compras mensuales de bonos afligió a los analistas e inversores que pensaban que el banco central debería haber ampliado el programa para apoyar mejor a la economía durante la pandemia del coronavirus.
El dólar comenzó la jornada a la baja y tocó mínimos de mediados de 2018, ya que el sentimiento optimista en los mercados mundiales llevaba a los inversores a comprar monedas más riesgosas como el yuan y el euro, a pesar del nuevo incremento de los casos del coronavirus.
La Reserva Federal de Estados Unidos seguirá siendo extraordinariamente expansiva hasta 2022 y un Partido Demócrata cada vez más progresista está buscando pedir prestado y gastar agresivamente, dijo Tai Wong, jefe de operaciones de derivados de metales básicos y preciosos en BMO.
El euro cerró en 1,2215 dólares, un avance de 8,97% en el año. La moneda regional alcanzó los 1,2310 dólares el miércoles, el nivel más alto desde abril de 2018, pero recortó las ganancias a medida que los inversores cuadraron las posiciones para el año.
