Ahora, el coronavirus agrega nuevas preocupaciones: Las restricciones a los viajes para impedir la propagación del virus están impidiendo la entrada de peones justo cuando empiezan las cosechas de lechuga y de frutos del bosque.
El presidente Donald Trump dijo el sábado que Estados Unidos empezará a comprar la semana próxima productos lácteos, cárnicos y otros por valor de 3,000 millones de dólares a granjeros, mientras se dispara el desempleo y la gente se ve obligada a hacer fila para conseguir alimentos.
Alrededor de 40 ingenios azucareros en Cuba permanecen abiertos pese al deteriorado clima y un bloqueo parcial del país en un esfuerzo por inyectar divisas a la deteriorada economía local.
Estos establecimientos se encuentran entre los más afectados por las medidas impuestas en México para frenar la propagación del coronavirus, como el cierre de negocios cuyas actividades son consideradas no esenciales, y el confinamiento de la población en sus casas.
Productores en Venezuela, un país que por años ha sufrido problemas de nutrición, están dejando que se pudran cultivos en los campos o alimentando a los animales ante las dificultades para transportar bienes a los mercados por la falta de combustible y en medio de una cuarentena por coronavirus.
Aproximadamente la mitad de la cosecha de espárragos del agricultor Jaime Urbina sigue sin recoger en sus campos en el centro de España, ya que el cierre de fronteras para frenar la expansión del coronavirus impide la llegada de trabajadores temporeros del este de Europa.
Algunas tiendas y pequeñas empresas reabrieron el lunes en la India rural, parte de un gradual levantamiento de una cuarentena de varias semanas que ha dejado a millones de personas sin trabajo ni acceso a alimentos, mientras el número de infecciones por coronavirus aumentó en más de 1,500.
Argentina se prepara para el primer caso de coronavirus entre los miles de trabajadores agroportuarios del país, uno de los principales proveedores mundiales de alimentos, lo que cambiaría el modo de trabajo de una industria clave de la economía local.
Con numerosas cosechas a la vuelta de la esquina, el gobierno de España anunció este martes que favorecerá la contratación de desempleados y de extranjeros para garantizar la mano de obra agrícola, amenazada por el cierre de fronteras inducido por el coronavirus.
Los cuellos de botella que en las últimas semanas han causado demoras en los embarques agrícolas de Argentina mostraron señales de alivio el viernes, a pesar de que municipios del país continúan limitando la circulación de camiones con granos para evitar la expansión del coronavirus.
Los trabajadores agrícolas mexicanos que se encuentran a ambos lados de la frontera entre Estados Unidos y México están trabajando en condiciones insalubres pese al rápido incremento de casos de coronavirus, afirman trabajadores, defensores de los derechos y académicos.
La decisión de Australia de prohibir la entrada a su territorio a todos los extranjeros desde el 18 de marzo, excepto a los residentes, preocupa al sector agrícola, especialmente a los productores de frutas y verduras, grandes empleadores de mano de obra extranjera.
Hacinados en dormitorios, trabajando muy cerca, sin mascarillas o guantes: aunque los agricultores son considerados esenciales, pues de ellos depende recoger las cosechas que alimentan a Estados Unidos, las condiciones en las que viven y trabajan los hacen muy vulnerables a contraer la covid-19.
“Muchachos, a partir de ahora cada uno trae su plato, su cuchillo y su tenedor. Y no se comparten más los mates”. La sentencia del productor agrícola Javier Domínguez debe haber resonado con fuerza entre los empleados de su granja ubicada en Luján, en la provincia de Buenos Aires...
Los envíos de soja a las plantas de procesamiento de Argentina se han reducido a la mitad y continúan bajando, dijo la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) el viernes, debido a que diversas ciudades restringen el paso de camiones con granos por temor al coronavirus, pese a una orden del Gobierno.
La preocupación por la seguridad de la alimentación mundial va en aumento, ya que alrededor de una quinta parte de la población mundial ya está confinada para luchar contra la creciente pandemia de coronavirus que ha infectado a más de 470,000 personas en 200 países y matado a unas 21,000.
Una de las principales localidades agroexportadoras de Argentina anunció el jueves que suspenderá las actividades de sus puertos a partir del viernes debido a la expansión del coronavirus, generando críticas de las empresas exportadoras en el distrito.
Los precios mundiales de los alimentos bajaron en febrero, poniendo fin a cuatro meses seguidos de avance, ya que el coronavirus afectó la demanda por algunos productos, dijo el jueves la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Un almacén construido en el Ártico para preservar semillas de arroz, trigo y otros alimentos tendrá un millón de variedades luego de que el martes se agreguen ejemplares cultivados en Perú y por los indios Cherokee en Estados Unidos.
El gobierno español aprobó nuevas normas para los precios de los comestibles en los supermercados, en respuesta a las semanas de protestas de los agricultores por la caída de sus ingresos.
