Entre los propósitos de Año Nuevo que se marcó Zuckerberg en la última década estuvieron aprender chino (mandarín), conocer diariamente una persona fuera del entorno de Facebook, leer un libro cada quince días o construir un robot de inteligencia artificial para organizar su casa.
La primera cuenta afectada fue la de la vicepresidenta de AfD y diputada en el Bundestag (Parlamento federal) Beatrix von Storch, quien en un tuit criticaba un mensaje difundido en varios idiomas, incluido el árabe, por la Policía de Colonia apelando a un Fin de Año pacífico.
"Kim Jong-un ha dicho que el botón nuclear está siempre en su escritorio. ¿Podría alguien de su hambriento y mermado régimen decirle que yo también tengo un botón nuclear, pero que el mío es mucho más grande y más poderoso que el suyo, y que funciona?", escribió Trump.
En su habitual línea satírica, "Titanic" decidió reaccionar al bloqueo de esa cuenta y reprodujo en clave de humor los tuits de Von Storch, diputada en el Bundestag (Parlamento federal) y vicepresidenta de Alternativa para Alemania (AfD), con 92 escaños en esa cámara.
Este 2018 se presenta como un año de vital importancia para el futuro de la Red tal y como la entendemos hasta la fecha. Las legislaciones de EU y Europa, aunque por motivos diferentes, pueden abrir las puertas a un cambio de rumbo.
