Funcionarios de la Reserva Federal dijeron el martes que el aumento de los casos de coronavirus amenaza con desacelerar el crecimiento de Estados Unidos una vez más en los próximos meses y que se necesitará una ayuda gubernamental más específica.
“El oro estuvo tratando de encontrar el equilibrio esta mañana, 24 horas después de que el terremoto de Pfizer cambió todo el panorama.Espero que el oro siga subiendo, pero llevará un poco más de tiempo”, dijo Tai Wong, director de comercialización de derivados de metales básicos y preciosos de BMO
La moneda y la bolsa de valores de Perú cayeron tras la asunción de Manuel Merino como presidente de Perú, luego de que el lunes el Congreso destituyera a Martín Vizcarra, lo que golpeó con fuerza a las acciones financieras ante temores de que avancen leyes en materia económica en el parlamento.
Los índices de tecnología, servicios de comunicación y consumo discrecional cayeron con fuerza el martes, ya que los inversores optaron por sectores que se espera que se beneficien de una reapertura total de la economía, como el de energía y el industrial.
Tras haber abierto ya en positivo por la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones estadounidenses, las bolsas se vieron literalmente propulsadas tras el anuncio de los laboratorios Pfizer y Biontech de que su vacuna sería "eficaz en un 90%" contra el covid-19.
Pfizer Inc y su socia alemana BioNTech SE, las primeras farmacéuticas en declarar un éxito en los ensayos clínicos de su vacuna contra el COVID-19, dijeron que esperan obtener la autorización para el uso de emergencia de su fórmula más adelante este mes.
Pfizer y su socio alemán BioNTech SE dijeron que su vacuna experimental fue más de un 90% efectiva para prevenir COVID-19 según los datos iniciales de un estudio a gran escala, una victoria en la lucha contra una pandemia que ha sacudido la economía mundial.
El yen, que se había convertido en un refugio favorito, sufrió su mayor pérdida frente al dólar desde marzo, con la moneda estadounidense escalando hasta un 2,2%. Las divisas que se benefician de la búsqueda por riesgo, como el dólar australiano y la corona noruega, se fortalecieron aún más.
Los inversores dijeron que también se sintieron tranquilos por la noticia del sábado de que Joe Biden había obtenido suficientes votos para ganar las elecciones presidenciales de Estados Unidos, como lo habían internalizado la semana pasada.
El peso mexicano, en tanto, retrocedía un 0,49% casi al cierre de la jornada, mientras que el índice referencial S&P/BMV IPC de la bolsa mexicana bajó un 0,5% en momentos en que las empresas comienzan esta semana a presentar sus estados financieros.
El Dow también se unió al alza del S&P. Ambos índices rompieron una racha perdedora de tres días impulsada por la detención de las pruebas de la vacuna y la discusión estancada en Washington sobre un nuevo paquete de alivio por la pandemia. El Nasdaq cerró la sesión con una baja.
El índice de precios al productor (IPP) para demanda final aumentó un 0,4% el mes pasado luego del alza de 0,3% de agosto, informó el Departamento del Trabajo de Estados Unidos, cifra que superó las expectativas y provocó un retroceso del dólar hasta llevarlo a terreno negativo.
J&J elevó su proyección de ganancias anuales, pero sus acciones cayeron un 2,3% luego de que suspendió los ensayos clínicos de su vacuna debido a una enfermedad inexplicable de un participante del estudio, lo que podría retrasar uno de los principales esfuerzos por contener la pandemia global.
El peso mexicano cotizó al cierre en 21,3530 por dólar, con una pérdida de un 0,6%, frente a los 21,2260 del precio de referencia de Reuters del lunes, afectado por la incertidumbre ante la paralización en las pruebas clínicas, lo que también quitó brillo a positivos datos de la economía china.
La recuperación de Estados Unidos de la recesión generada por el coronavirus ha sido más robusta que lo esperado, dijo el martes una importante autoridad de la Reserva Federal, aunque agregó que podría tomar alrededor de tres años para que la economía retome su fortaleza.
Impulsado por más de 20 billones de dólares de estímulo global y las acciones tecnológicas, el índice de acciones mundiales del MSCI aumentó un 14% en julio y agosto para recuperar los niveles récord que había perdido en febrero cuando el COVID-19 se disparó por primera vez.
El ánimo en el mercado ha variado enormemente a últimas fechas, a menudo cambiando de dirección a cada hora. El miércoles, el S&P 500 tuvo una modesta ganancia cuando inició la jornada y terminó el día con una caída de 2,4%.
Los precios del oro subieron un 1% el lunes ayudados por un dólar más débil y expectativas de que la Reserva Federal reitere su postura cauta en política monetaria esta semana, lo que aumenta el atractivo del lingote como un refugio.
La mayoría de monedas y bolsas de América Latina subieron el lunes por la caída de dólar y las esperanzas de que haya una vacuna contra el coronavirus luego de que AstraZeneca reanudó sus ensayos de Fase III.
Las monedas y la mayoría de las bolsas de valores de América Latina cerraron al alza el miércoles en medio de un retroceso del dólar y un repunte de las acciones globales tras las fuertes pérdidas de la víspera, por el desplome de los títulos tecnológicos.
