La bolsa de Sao Paulo caía el jueves, presionada por el declive de las acciones de Vale y ajustes de movimientos en los papeles brasileños que cotizan en Nueva York en la víspera, cuando los mercados del país sudamericano estuvieron cerrados por un feriado.
En un intento por frenar la depreciación del peso respecto del dólar, el Banco Central de Argentina anunció el lunes un nuevo cambio en su política monetaria que le permitirá vender la divisa estadounidense por debajo del actual tope de la banda de flotación cambiaria.
La bolsa brasileña cayó el viernes y las acciones de Petrobras estuvieron entre las mayores presiones negativas ante la fuerte caída de los precios del petróleo en el exterior.
Los mercados de Argentina caían con fuerza el jueves ante las persistentes dudas sobre el panorama político del país después de que los últimos sondeos de opinión para las elecciones de octubre mostraran un constante retroceso del presidente Mauricio Macri.
El euro tocó un mínimo de una semana el jueves, después de que débiles datos de manufacturas en Europa aumentaron los temores sobre una economía que no logra recuperar el impulso.
Las acciones brasileñas subían el jueves en víspera del feriado de Viernes Santo, apoyadas por Petrobras luego del reajuste del precio del diésel y pese a un desplome notorio de la firma Cielo, aunque el avance era limitado por la cautela en torno a la reforma al sistema de pensiones.
El índice referencial de la bolsa B3 de Sao Paulo, el Bovespa, escaló un 1,34 por ciento a 94.333 puntos. El volumen financiero fue de 14,000 millones de reales.
El peso mayorista de Argentina caía fuerte el martes por una renovada ola compradora de dólares por parte de inversores privados, quienes dolarizan carteras ante la creciente inflación, la recesión económica y la incertidumbre política en un año de elecciones presidenciales.
La Bolsa de Brasil cayó el jueves, presionada por las acciones de Petrobras y del sector bancario, en un día de cautela en los mercados externos y tranquilidad política a nivel local.
La Bolsa de Brasil cerró en baja el miércoles tras una sesión volátil, mientras los inversores esperan novedades respecto a la reforma al sistema de pensiones.
La Bolsa de Brasil cayó un 1 por ciento el martes, presionada por la cautela de los inversores respecto a la reforma al sistema de pensiones, en una rueda en la que los principales mercados externos también tuvieron un desempeño negativo.
La bolsa de Sao Paulo subía el viernes mientras los operadores esperaban más novedades en torno a las discusiones sobre la reforma de pensiones de Brasil, en una jornada marcada por la tendencia positiva de los mercados globales tras un positivo reporte de empleo de Estados Unidos.
La agencia calificadora Fitch dijo que los riesgos para el crédito de todos los sectores económicos de Argentina continuarán en 2019 a partir de un panorama fiscal desafiante y volatilidad cambiaria, entre otros factores.
La Bolsa de Brasil subía el miércoles, impulsada por un ambiente externo positivo tras datos económicos alentadores en China y por la expectativa de progreso en el diálogo comercial entre Pekín y Washington.
Argentina sigue negociando los términos de un proyecto de energía nuclear financiado por Pekín en la provincia de Buenos Aires, dijo el martes un funcionario del país sudamericano, y añadió que el diseño del reactor Hualong One en la nación asiática sería una buena opción para el plan.
La Bolsa de Brasil subía el viernes y se acercaba a los 96,000 puntos, impulsada por el avance de JBS y por un mejor ánimo en relación al panorama político del país.
Las acciones brasileñas subían el jueves tras su desplome de la sesión previa, en un repunte impulsado por la banca y con el avance destacado de Vale y Eletrobras, aunque persistía el recelo en el ambiente político por potenciales escollos en el avance de la reforma al sistema de pensiones.
La Bolsa de Brasil subió el martes tras cerrar en números rojos en las cinco sesiones anteriores, impulsada por las acciones de Petrobras por las expectativas sobre la negociación con el Gobierno sobre la denominada “cesión onerosa”.
Inversores en bonos argentinos que se rigen por leyes locales se están pasando a los títulos públicos del país bajo legislación estadounidense, que consideran más seguros, mientras la economía sigue sin recuperarse y crecen la incertidumbre política antes de las elecciones de octubre.
Las monedas de la región operarían con un tono de cautela esta semana, en medio de los tira y afloja en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China, la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea y la reunión de política monetaria de la Reserva Federal.
