La tragedia de los tres estudiantes de cine que murieron a manos del crimen organizado en Jalisco pone a México de nuevo ante una de sus peores pesadillas. Los jóvenes aspirantes a cineastas fueron secuestrados, torturados, asesinados y disueltos en ácido mientras grababan una tarea escolar.
El primer trimestre de este año fue "de miedo" en México, con un aumento en los homicidios del 15%, en medio de una pesadilla a la que no se le ve fin, tras la ofensiva lanzada hace 11 años por el gobierno contra las bandas criminales con el apoyo de las Fuerzas Armadas.
Los tres estudiantes desaparecidos en marzo, cuyos cuerpos fueron disueltos en ácido, son las últimas víctimas de la lucha entre distintos grupos del crimen organizado en México y la violencia resultante ha provocado la desaparición de más de 30,000 personas en todo el país en la última década.
En las intervenciones ha defendido lo hecho durante su mandato y ha cuestionado que esta administración encabezada por Enrique Peña Nieto haya dejado de invertir en las policías locales y se hayan aplazado las evaluaciones a las fuerzas de seguridad.
Al repeler la agresión los municipales mataron en el lugar a ocho de los agresores, mientras un policía también fue abatido y otros tres quedaron heridos, uno de ellos muy grave, por lo que fueron trasladados a unidades hospitalarias de la localidad y de Guadalajara, indicó la dependencia.
Estados Unidos, México y Colombia irán tras narcotraficantes en las costas sudamericanas del Pacífico en una operación que está programada a comenzar el domingo y que duraría durante el futuro previsible, informaron funcionarios de la Guardia Costera a The Associated Press.
La Marina mexicana negó hoy que disparos realizados desde un helicóptero de la institución causaran la muerte de una familia de civiles durante enfrentamientos con el crimen organizado ocurridos la madrugada del domingo pasado en las inmediaciones de Nuevo Laredo, estado nororiental de Tamaulipas.
Los agentes Octavio Martínez Quiroz y Alfonso Hernández Villavicencio, adscritos a la fiscalía contra el crimen organizado de la PGR, desaparecieron el 5 de febrero en los límites de los estados de Nayarit y Jalisco; 10 días después, las autoridades hallaron sus cuerpos dentro de un vehículo.
Los ministros que integran el máximo órgano de justicia aprobaron por mayoría de votos que las revisiones a personas y vehículos por parte de agentes de la Policía sin que haya una orden escrita son constitucionales.
El subprocurador alegó que, por un lado, no hubo "reivindicación" alguna por parte de ningún grupo, mientras que se descarta al crimen organizado porque una acción así es "contraria a sus intereses", dado que implica el reforzamiento de la presencia policial en la zona.
En estos cinco años, los grupos de autodefensa que se formaron en ese y otros estados han sido cooptados, desmovilizados y varios de sus integrantes detenidos, con contadas excepciones. ¿Tomar las armas sirvió para cambiar algo?
El secretario general de Gobierno de Jalisco, Roberto López Lara, ha confirmado que se busca a otros tres policías municipales y a varios civiles por su probable participación en el caso, entre ellos el director de seguridad pública de Tecalitlán, Hugo Enrique Martínez.
Cuatro policías del municipio de Tecalitlán, sur de Jalisco, han sido detenidos luego de confesar que entregaron al crimen organizado a los italianos Raffaele Russo, a su hijo Antonio Russo y a su sobrino Vincenzo Cimmino, vistos por última vez el 31 de enero en Tecalitlán, sur de Jalisco.
El fiscal de Veracruz, Jorge Winckler, fue elegido en el cargo durante nueve años (2016-2025) para llevar algo de luz a un lugar quebrado socialmente, donde cientos de madres recorren cada día hospitales, morgues y las casi 400 fosas abiertas, en busca de sus hijos.
Francesco Russo negó que su padre, Raffaele, de 60 años, utilizara documentos falsos durante su permanencia en México, y reiteró que los tres napolitanos se encontraban en ese país para vender generadores eléctricos. "Que Italia se mueva, que nos digan en dónde están.
El alcalde de Tecalitlán, estado occidental de Jalisco, Víctor Díaz, consideró como "un hecho aislado" la desaparición de tres italianos, pertenecientes a una misma familia, el último día de enero pasado, que ha generado un gran revuelo en México e Italia
Sostuvo que todavía no se puede "descartar ni afirmar" si la desaparición de los italianos se relaciona con el crimen organizado que opera en el sur de Jalisco, zona donde se ha decomisado droga y desmantelado varios laboratorios clandestinos en los últimos meses.
Más allá de los tiroteos en plena calle que acaparan titulares, la ciudad mexicana de Reynosa es un potente motor económico gracias a sus maquilas, y una muestra de la imparable relación comercial entre México y Estados Unidos.
También los expertos y las autoridades atribuyen el aumento histórico de homicidios, que llegó a su punto máximo en 20 años en 2017, según cifras oficiales, a la impunidad, a la falta de buenos policías o a la feroz disputa de las bandas por apoderarse de territorios.
Este busca, a través de varias acciones, cambiar la imagen de las zonas más marginadas o mejorar la asistencia médica, "reconstruir el tejido social", cuenta a Efe el secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente del estado, Gilberto Estrella.
